River busca refuerzos para suplir los casos de dopaje
Guaraní, su rival en Libertadores, indignado con la CONMEBOL
River Plate vive horas agitadas por el escándalo de dopaje de al menos dos de sus futbolistas, que dieron positivo en la Copa Libertadores. El centrocampista uruguayo Mayada y del defensa argentino Martínez Quarta fueron suspendidos provisionalmente y ayer declararon en la sede de la CONMEBOL en Paraguay.
El delantero Sebastián Driussi, al que la prensa argentina también involucró en el escándalo la semana pasada, de momento no fue denunciado y River le ha puesto en el mercado para acelerar los fichajes de cara a los octavos de final de la Copa Libertadores, los días 4 de julio y 8 de agosto. El club tendría un acuerdo con el Zenit de San Petersburgo para vender el argentino de 21 años por 15 millones. Con ese dinero pretenden fichar a Ignacio Scocco, delantero del Newell’s, y Enzo Perez, del Valencia. El exportero del Depor, Germán Lux y el central del Rosario, Javier Pinola, ya pasaron reconocimiento médico.
El rival de River en Libertadores, el Guaraní de Asunción, se mostró indignado con la decisión de la CONMEBOL de ampliar de tres a seis el número de nuevos jugadores que se pueden inscribir en la fase eliminatoria del torneo.
“La cara de tonto tenemos. Sabemos que porque River tuvo este problema la Confederación autorizó lo de los seis cambios en la lista, por una exigencia y una presión del club. Es triste que se modifique el reglamento cuando no corresponde. El Gremio solicitó lo mismo hace unos años y se lo negaron”, expresó indignado el entrenador del Guaraní, Daniel Garnero, en TyC Sports.