Guedes acorrala a Berizzo
El Valencia hizo trizas al Sevilla y Mestalla sueña
El Valencia no sólo va en serio, va a más. Contra el Sevilla logró su quinta victoria consecutiva y sigue invicto tras nueve jornadas. Ello habiendo jugado contra seis de los ocho primeros de la clasificación. Marcelino ha moldeado un equipo que no se siente inferior a nadie y ha recuperado para la causa a una grada de Mestalla que vuelve a divertirse e identificarse con los suyos. Como con Guedes, el Piojo de la era Lim, o con el pundonor de Zaza. Ellos y Santi Mina le dieron la victoria y dejaron a Berizzo en una delicada situación. Su Sevilla transmitió poco. Desde luego nada de lo que últimamente acostumbraba. Gonzalo Guedes salió de París para enamorar a Mestalla y la verdad es que el portugués se está haciendo querer. Ayer dos goles y otras tantas asistencias. Si Zaza recogía en los prolegómenos el galardón de LaLiga como mejor jugador de septiembre, veremos si no lo es Guedes de octubre. Golazos le está poniendo a su nominación. Porque si exquisito fue el que hizo hace una semana al Betis, impactante fue el primero que anotó a Sergio Rico. Velocidad, calidad, imaginación, precisión y potencia. Todo ello derrochó en los apenas ocho segundos que transcurrieron desde que cogió el balón en el centro del campo hasta que fusiló a Sergio Rico.
De primeras, en lo que fue el partido, se peleaba por cada metro con pico y pala, un ritmo que hizo que los de Berizzo acusaran los viajes por Bilbao y Moscú. Además el Valencia tiene un interruptor en su mecanismo colectivo que llegados a la media hora de partido lo activa y va ganando terreno como una perforadora hace un túnel.
El Sevilla vivía, sobrevivía más bien, por la sobriedad de Pizarro y del plus emocional que le daba ir empate. Pero llegó Guedes y, como quien no quiere la cosa, en el 42’, hizo lo que hizo. Al poco de comenzar la segunda mitad, Zaza, a quien Mestalla despidió en pie, hacía el 2-0, el octavo en su cuenta. El partido parecía ya resuelto. Por si acaso se encontraba con un gol y se metía en el partido, Guedes primero cedió a Mina en el 3-0 y después hizo el 4-0. Veremos qué pasa con Berizzo.
Marcelino El techo es seguir por este camino. Seguir con el esfuerzo, compañerismo y humildad. Cada partido que jugamos es una final. Hay que tener ambición. La euforia nos va a confundir y no jugaríamos como ahora”. Berizzo No le temo a ser destituido. Temo no encontrar la solución a los problemas. Hay que levantar la cabeza. Después de Moscú necesitábamos un buen partido. Creíamos que era éste y nos volvemos a ir golpeados”.