Cristiano no descansa ni en los entrenamientos
Marcó el gol del triunfo y se le vio muy enchufado
EI Alfredo Di Stéfano abrió el sábado sus puertas para que 5.000 aficionados pudieran ver en directo el entrenamiento del Madrid. El club organizó un evento festivo que contó con cinco invitados de lujo: los trofeos conquistados por el Madrid en este año que se despide. Las entradas gratuitas para el entrenamiento (exclusivas para socios, dos por carnet) se habían agotado.
Eran las 17:05 horas cuando Zidane asomó por el túnel de vestuarios y la grada comenzó a aplaudir. La derrota contra el Barcelona es historia. Borrón y cuenta nueva por Navidad. Este sábado todo era ilusión. En la fiesta navideña no estuvo Benzema, el principal señalado tras la derrota en el Clásico: el francés fue la única ausencia. El resto se ejercitó a tope.
Cristiano, que demostró que no quiere perder ni en los rondos, lideró la suave carrera continua con la que dio comienzo la sesión. El portugués no entiende de entrenamientos: celebró los goles (marcó el penalti decisivo que le dio la victoria a su equipo en el partidillo), protestó a Zidane cada falta señalada y se mostró cariñoso con un público que le adora. El siete blanco fue, junto a Ramos, Isco y Asensio, el más aclamado por los aficionados. Sorprendió especialmente la fiebre por el balear. Más allá de los cánticos coreando su nombre, la camiseta con su dorsal era de las más repetidas entre los niños que acudieron al estadio del Castilla.
Zidane, a pesar de la presencia de público, no cambió su rutina de entrenamiento: rondos, posesiones en espacios reducidos y partidillo para finalizar. En ese duelo no mostró sus cartas y mezcló a titulares y suplentes. Un equipo lo formaron Keylor; Carvajal, Vallejo, Ramos, Theo; Marcos Llorente, Kroos, Kovacic, Lucas Vázquez, Cristiano y Asensio. Enfrente: Casilla; Achraf, Varane, Nacho, Marcelo; Casemiro, Modric, Ceballos; Isco, Borja Mayoral y Bale. Vencieron los primeros.
La buena noticia para Zizou es el buen momento de forma de Bale. El galés completó el entrenamiento al 100%. Se le vio activo, con chispa. Incluso podría ser titular el miércoles contra el Numancia en Copa para comenzar a recuperar sensaciones (no ha jugado de inicio desde que se lesionó el pasado 26 de septiembre).
Cuando finalizó el entrenamiento, casi todos los jugadores regalaron su camiseta y Bale incluso lanzó sus botas a la grada.
Sin descanso. El Madrid no tendrá más vacaciones hasta final de curso. Se entrenarán el 31 de diciembre (11:00 horas) y también en Año Nuevo. Zizou, eso sí, ha programado la sesión del día 1 a las 17:00 para que los jugadores puedan disfrutar de la Nochevieja en familia.
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