El dueño del PAOK baja al campo con una pistola al cinto y amenaza al árbitro: "Estás muerto"

El choque ante el AEK se suspendió tras anularse un tanto al PAOK en el 90'

Tras haber vivido el sábado incidentes en Londres y Lille, con los aficionados saltando al campo para amenazar a sus jugadores, ayer le tocó al campeonato griego durante el partido que enfrentaba al PAOK de Cañas y Crespo con el AEK de Manolo Jiménez y Erik Morán. Ambos equipos se disputan el título. Mucho más después de que el Comité de Apelación de la Federación griega de Fútbol (EPO) haya devuelto al PAOK los tres puntos que le fueron retirados tras el ataque por parte de un aficionado al entrenador del Olympiacos, Oscar García Junyent, el pasado 25 de febrero. Además, la Comisión retiró la sanción al PAOK de jugar dos partidos a puerta cerrada, por lo que el choque se disputó en el estadio 'La Tumba' de Salónica.

Antes del partido ya hubo incidentes entre aficionados locales y la Policía que no fueron a mayores. Y durante el choque tampoco hubo demasiados disturbios. Sin embargo, en el tramo final del encuentro, se armó el lío. Varela, del PAOK, anotó de cabeza en el minuto 90 el 1-0. El árbitro, Georgios Kominis, pese a haber concedido en primera instancia gol, reculó y señaló fuera de juego de otro futbolista que no interviene en la jugada. Entonces, el partido tuvo que ser suspendido. Los jugadores del PAOK rodearon al colegiado. Incluso el propietario de PAOK, Ivan Savidis, saltó al campo y le pidió a su equipo que abandonara el campo en señal de protesta. En las imágenes se puede ver a Savidis, (nacido en Georgia, diputado de la Duna Estatal rusa, uno de los empresarios ruso más rico del mundo y estrechamente relacionado con Vladimir Putin) con un arma en el cinto. Incluso desde el AEK apuntan a que llegó a amenazar al colegiado al decirle "estás muerto". También recibió amenazas el árbitro del director deportivo del PAOK, "estás acabado como árbitro".

El partido fue suspendido dos horas después pese a que los jugadores del PAOK estuvieron calentando, mientras el cuerpo arbitral y la plantilla del AEK eran escoltados en sus vestuarios. El presidente del AEK prohibió a los suyos volver al campo y un observador de la liga suspendió el choque. Eso sí, el surrealismo no terminó ahí pues, según el acta, se suspendió con 1-0 a favor del PAOK...