Un Arsenal que ha perdido señas del pasado
Sus problemas defensivos le limitan y pierde mucho fuera
Wenger aspira a la Europa League como la competición que le mantenga en el banquillo ‘gunner’. Las dudas sobre su futuro pesan también sobre los jugadores. El estilo quedó por el camino.
El Arsenal es el mismo del año pasado. Y del anterior. Tiene momentos buenos y momentos malos, pero los buenos no llegan con la consistencia necesaria y los malos suelen aparecer en el peor momento posible. Es el club de los ‘casi’: cuando parece agarrarse a la calidad de Wilshere o Ramsey, falla Özil o al revés; cuando parece que está a punto de competir por la liga, se cae. Posiblemente les falte más personalidad: de ahí se explica su horroroso estado de forma en los partidos de fuera. En la liga ha conseguido menos puntos lejos de su estadio que el Leicester o el Burnley, la peor puntuación en ese apartado de su historia desde que se formó la Premier League. Ante el CSKA, el empate de la vuelta en Moscú no reflejó las dificultades que tuvieron los de Wenger.
Lo que hace con el balón es quizá lo menos preocupante. Sus problemas defensivos son los que le limitan: les meten goles en casi todos los partidos, Peter Cech nunca había sufrido tantos encuentros encajando como esta campaña. Mustafi no ha sido la solución que esperaban muchos. Nacho Monreal y Laurent Koscielny no garantizan suficiente solidez atrás en parte porque los centrocampistas no realizan las labores defensivas que deberían. Granit Xhaka, Mohamed Elneny, Wilshere o Ramsey no protegen al equipo y convierten al Arsenal en la peor defensa entre los seis primeros de la liga. Las dudas sobre el futuro de Wenger, al que le queda un año de contrato, pesan
sobre sus jugadores. El estilo atractivo del pasado ha desaparecido. Hace solo dos años el Arsenal creaba más ocasiones claras que nadie, la temporada pasada eran los terceros, y ésta los cuartos. Las competiciones coperas han sido las únicas alegrías de estos últimos años, y Wenger aspira a conseguir en Europa el salvavidas que le mantenga en el banquillo.