AS (Las Palmas)

Costa planea sobre Londres 180 minutos los separan de la final. Despedida de Wenger en casa de Europa

Simeone jugó al despiste de si estará o no ante el Arsenal

- PATRICIA CAZÓN

Una final en la semifinal. Eso es lo de hoy. Lo dicen las casas de apuestas, siempre favorito Atleti, segundo el Arsenal. Lo gritan las sensacione­s. Atleti, Arsenal, final. Pero no. Semifinali­stas. Hoy empiezan, esta noche, en el Emirates. Es mucho más que un partido de ida de semifinale­s de una Europa League.

Que Wenger baja el telón. 22 años, varias vidas. El último partido en Europa, en el Emirates, el último de 102, el último tras mucho brillo y un largo desierto. El último. Con todo lo que ello significa. Después de tanto. Se fue Ferguson del United, 27 años. Se va él. El Cholo es su espejo en España. Siete años en el banquillo. Cinco títulos, tantas clasificac­iones de Champions para volver a la casilla de salida, la Europa League, tanto pesó Qarabag, no ganar en Roma. Hasta aquí, salvo Lisboa, Sporting allí, ha sido un paseo.

Simeone, sin Juanfran, viajó con

20 y con Costa. Ayer jugó al despiste. Entrenó, podría jugar, no desveló. Aunque Lisboa, la otra, la de 2014, debería avisar: jugó y duró nueve minutos. Mejor pájaro en mano. El suyo es francés. Grizi y Gameiro, con ellos ensayó estos días. El suyo es cantera, Koke, Thomas y Saúl. El último suele aparecer en partidos como éste, en los días grandes. Está llamado a coger el testigo de ese que aguardará en el banco, Torres. El Arsenal era una de sus víctimas. Cuatro goles y una asistencia en sus años Premier.

Arsenal y Atleti no tienen pasado juntos, éste es su primer enfrentami­ento oficial. Para el Arsenal, la victoria en Lyon, será salvar la temporada, llegar a la Champions. Por segundo año seguido no ha entrará por la liga, es 6º. La oportunida­d es ésta. Esta semifinal.

El Emirates da confianza en Europa, 8 partidos seguidos sin perder (con 6 victorias), pero no en liga (sin ganar en 2018). El Costa de Wenger es Özil. En duda hasta ahora por un catarro, ayer se entrenó. Es su jugador diferente. Sin Aubameyang, no está inscrito, y con bajas como las de Elneny y Mkhitaryan, su hombre es Lacazette, el amigo de Grizi, ese delantero que no es del Atleti por la sanción FIFA, cerca estuvo. En estos 22 años Wenger sólo tuvo cerca dos veces un título europeo con el Arsenal. Dos finales jugó, las dos las perdió. Esta es la tercera. Y la última. Enfrente el Cholo: sólo perdió una semifinal de cinco.

A Lyon

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