Los Celtics ponen a LeBron James contra las cuerdas
Triunfo y 2-0 en la final del Este
LeBron James lleva siete finales de la NBA consecutivas: cuatro con Miami Heat, tres desde que regresó a su Cleveland natal para jugar en los Cavaliers. La octava se le ha puesto muy cara después de la segunda derrota en la final del Este ante los Celtics: 107-94 y un 2-0 camino de Ohio que acerca a los orgullosos verdes a su primera pelea por el anillo en ocho años: desde que se juega a siete partidos, 37-0 en eliminatorias en las que han ganado los dos primeros.
Después de la paliza del primer partido (108-83), los Cavs reaccionaron casi exclusivamente de la mano de LeBron, que anotó 21 puntos en el primer cuarto (por 15 totales del primer encuentro) y acabó con 42, 10 rebotes y 12 asistencias. Nunca en la historia de los playoffs un jugador había hecho esos números por encima del 50% en tiros (16/29) y había perdido el partido. La prueba más evidente de la enorme soledad que le tiene contra las cuerdas. El sábado, su penúltima oportunidad de reacción, ya con la serie en Cleveland.
Los Celtics, por su parte, volvieron a cabalgar el rugido del Garden (9-0 en playoffs), esta vez en un duelo mucho más sufrido: los Cavs manejaron ventajas de más de diez puntos y estaban 52-61 poco después del descanso. De ahí al final, parcial de 55-33. Jaylen Brown anotó 23 puntos, Al Horford 15 con 10 rebotes y los Celtics, pese a las lesiones de Kyrie Irving y Gordon Hayward, están a dos partidos de apear a LeBron en los playoffs del Este. Los últimos en lograrlo fueron también ellos, en la segunda ronda de 2010.