El City empató con bronca entre Guardiola y Agüero
El VAR anuló un gol por mano de Laporte en el 93’
Disparar 30 veces, tener la posesión, dominar el juego y asfixiar al contrario no son suficientes si no tienes la suerte de tu lado. El Manchester City empató contra el Tottenham en un partido en el que mereció marcharse goleando y terminó sufriendo la maldición de Lucas Moura, investido ya oficialmente como talismán de los Spurs. La tensión entre los citizens fue tal que, cuando Guardiola decidió cambiar al ‘Kun’, ambos se encararon y Arteta tuvo que separarles. Jugador y
entrenador escenificaron la paz tras el gol de Gabriel Jesús en el 93’, que fue finalmente anulado por el VAR por una mano de Laporte.
Más allá de la maldición con el
VAR, que recordó a lo sucedido el año pasado en Champions, los de Guardiola dominaron a los Spurs. Aguantaron el chaparrón durante 20 minutos, momento en que De Bruyne decidió inventarse un centro combado al segundo palo que desconcertó a toda la defensa y permitió a Sterling marcar su cuarto gol en apenas dos jornadas.
El gol del inglés sirvió, eso sí, como para revulsivo de los de Pochettino, que aprovecharon por medio de Lamela una horrible colocación de Ederson para igualar el encuentro e intentar respirar ante el domino de los mancunianos.
Éstos, en vez de ceder terreno, volvieron a encomendarse a la magia del belga, que fue el mejor, para que éste pusiese otro pase medido al ‘Kun’ Agüero, que no falló desde el borde del área pequeña. Pero poco después, y en uno de los tres únicos remates de los Spurs, Moura volvió a convertirse en el talismán del Tottenham al marcar, 15 segundos después de entrar al terreno de juego, el tanto del empate definitivo.
Guardiola, tras el partido, restó importancia a lo sucedido con Agüero: “Es un tipo al que quiero mucho”.
Talismán Moura logró empatar el partido tras 15 segundos en el campo