El Sadar recupera el sabor de Primera dos años después
El Eibar, ante un campo en obras
EI Sadar, un campo con enorme solera, abre una nueva función en Primera tras dos años alejado de la élite. El fortín navarro, en obras de remodelación, ha quedado engrandecido en la travesía del curso pasado por la categoría de plata: acumuló 19 victorias, 17 de ellas logradas de forma consecutiva. Acabó invicto. La última derrota de los rojillos en su estadio se remonta al 1 de abril de 2018, ante el Tenerife (0-1). Y ante eso, el Eibar quiere resarcirse del traspiés sufrido en la primera jornada frente al Mallorca venciendo a otro recién ascendido, un Osasuna que salió victorioso de su primer partido y que llega a tope.
El plantel navarro, aún en proceso de cohesión entre el bloque de la pasada temporada y las nuevas incorporaciones, contará con la baja segura de Perea, que esta semana
sufrió una lesión muscular en el cuádriceps izquierdo. Pero Arrasate tiene dónde elegir: dispone de 23 futbolistas y a todos los ha citado para hoy.
Osasuna afrontará el partido después de doblegar al Leganés tras un tanto de bandera de Chimy Ávila, un jugador que la pasada campaña saboreó la sangre armera con dos golazos en la segunda vuelta con el Huesca.
Por su parte, el Eibar probó en primera mano la dureza de la máxima categoría, en la que media hora dormido te puede salir caro. Para los armeros será importante puntuar, ya que hasta la cuarta jornada no disputarán su primer partido en casa, y en la próxima jornada tendrá que visitar el Wanda Metropolitano. Vuelve Diop, un pilar fundamental del centro del campo para Mendilibar que apunta a la titularidad tras lesión y están fuera los lesionados Cote y Burgos.