La Selección ya se entrena en Guangzhou
Gasol volvió al trabajo con el resto de sus compañeros
La poderosa Guangzhou, una urbe de casi 15 millones de habitantes, recibió a la Selección con el mismo tiempo inestable que dejó en Ningbó por la mañana. España llegó a primera hora de la tarde a Cantón, nombre antiguo de esta interminable mole que el avión tardó casi un cuarto de hora en atravesar en el aterrizaje, y se instaló cómodamente en el Hilton del distrito de Tianhe, el corazón palpitante de una ciudad repleta de rascacielos y actividad deportiva.
Superado ya el jet-lag con los cuatro días en Ningbó, la Selección no fue perezosa y se acercó al Guangzhou Gymnasium para conocer su casa en la primera fase del Mundial, con una buena noticia: Marc Gasol no se quedó en el hotel. Recuperado, acompañó al grupo al recinto y se irá integrando con relativa normalidad al trabajo a las órdenes de Scariolo. Oriola y Rudy, los otros tocados, también mejoran. El primero, de sus amagos de gripe y gastroenteritis. Y el segundo no jugó el encuentro contra Rusia simplemente por precaución. Básicamente, y después de dos partidos de cierta intensidad, el entrenamiento fue para estirar piernas, tomar contacto con el escenario donde se jugarán los encuentros y adecuar los horarios a la cena y el descanso.
Túnez. Hoy Scariolo sí empezará a focalizar ya el entrenamiento en el rival de mañana, Túnez. Luis Guil, ayudante de Scariolo especializado en defensa, se trajo el trabajo casi completo desde España. A falta de pequeños detalles, todo parece en hora para la Selección.