Drolé se fractura la tibia: cinco meses fuera
Se lesionó por la mañana, y por la tarde fue operado de urgencia
Era la de ayer una mañana plácida en la Ciudad Deportiva de la UD, esa moderna instalación que desde principios de julio corona la otrora abandonada colina de Barranco Seco. Con la intensidad propia de un equipo que siente que carbura, se ejercitaba además Las Palmas en calma, para sí misma, prohibidas como estaban las miradas ajenas, lo mismo da que fueran de aficionados o periodistas. De pronto, un silencio cortante. Segundos antes, un sonido desgarrador. “Como una tabla de madera que se parte”, confesó Juan Naranjo, jefe de los fisioterapeutas de Las Palmas, en la radio del club. Se había roto Drolé en un mal gesto. Además, sin entrada de por medio, él solo al hacer un cambio de ritmo. Al instante, todos los allí presentes se dieron cuenta de la gravedad de la situación. La primera exploración, a ras de césped y en la que incluso estuvo presente Miguel Ángel Ramírez, no dejaba dudas: había que llevarse al futbolista africano al hospital a la mayor brevedad posible. Así lo ‘exigió’, por ejemplo, Diosdado Bolaños, el médico que comparte el día a día con la primera plantilla de Las Palmas.
“El chaval va a estar un buen tiempo fuera”, aseguraba en AS uno de los compañeros de Drolé. Mientras el extremo marfileño ya se dirigía al Hospital Perpetuo Socorro en ambulancia, vehículo que recogió al jugador en el mismo campo Ernesto Aparicio donde se ejercitaba con normalidad minutos antes, los primeros pronósticos no podían ser peores: fractura de tibia y peroné en la pierna izquierda que se confirmó a su llegada al hospital y, por tanto, varios meses de baja. “Ha sido muy desagradable”, confesó otro de los moradores del vestuario amarillo. La conmoción fue tal que el club decidió incluso cancelar las entrevistas pactadas con los diferentes medios de comunicación, una de ellos con el Diario AS. Mientras, los pupilos de Pepe Mel y el propio entrenador madrileño poblaron rápidamente Pepe Mel sufrió ayer dos bajas de distinta consideración. A la ya mencionado de Drolé se unió la de Nosa, que apenas llevaba un par de días en la disciplina amarilla. El futbolista nigeriano cesó sus entrenamientos con Las Palmas aduciendo motivos personales, pero podrían haber surgidos reticencias dentro de Las Palmas debido al mal estado de su rodilla. Con Mel había coincidido en el Betis. sus distintos perfiles en redes sociales con mensajes de apoyo al compañero caído.
Clave. Sin tiempo que perder, Drolé fue intervenido ayer mismo, a las 18.00 horas, en las propias instalaciones del Perpetuo Socorro, centro médico responsable de los servicios médicos de la Unión Deportiva. El doctor Gerardo Garcés, jefe médico del club, dirigió una intervención que acabó confirmando esa “fractura espiroidea de tibia y transversal de peroné” en la pierna izquierda del futbolista.
Garcés reconoció que la rápida y efectiva intervención de los responsables médicos presentes en ese momento, así como la del personal de la ambulancia, resultó clave para que la dolencia no fuera a más. “Llegó (al Hospital) muy bien atendido por los sanitarios. Enseguida se confirmó el diagnóstico inicial, y pusimos una férula fija”, terció Álvaro Blanco, médico también presente en la operación.
Garcés confirmó también que el propio Drolé podría estar de nuevo disponible para Pepe Mel entre marzo y abril. “Me dan más miedo las lesiones de ligamentos. Las fracturas suelen ir bien si el cuerpo reacciona adecuadamente”, dijo el galeno, que sentenció: “Lo normal es que el jugador pueda reincorporarse, con el alta médica, en 3-4 meses. La semana que viene podría empezar a apoyar la pierna, y esperamos que antes incluso de los 5 meses pueda estar listo para jugar”.
NOSA, UN VISTO Y NO VISTO