Alejandro Blanco
El presidente del Comité Olímpico Español, en AS a nueve meses de Tokio 2020 ● “España lo va a hacer muy bien”
Alejandro Blanco (Ourense, 69 años) decretó en AS, en el inicio de la serie Desayunos Olímpicos, que analizará las posibilidades de España, el estado de optimismo (moderado) a nueve meses exactos de los Juegos Olímpicos de Tokio (24 de julio-9 de agosto). “España lo va a hacer muy bien. En cada ciclo olímpico realizamos estudios con los resultados de Mundiales y Europeos, y siempre nos hemos movido en más-menos una medalla respecto a las previsiones. Por eso somos optimistas”, se arrancó el presidente del Comité Olímpico Español (COE), que será el jefe de la delegación en Japón.
Blanco, con la precaución de un gallego y la mesura castellana que le dieron sus años de profesor de judo en Valladolid, evitó dar su pronóstico sobre medallas. “Primero hay que ver qué equipo llevamos y, sobre todo, cómo llegan físicamente. Ahora mismo, hay 115 deportistas clasificados, pero calculo que alcanzaremos unos 300 (306 acudieron a Río 2016). Y el deporte español no puede vivir sólo del resultado y las medallas, porque cada fin de semana hay éxitos. Debemos ser realistas y estar contentos con lo que somos y hacemos. Ya lo dicen los políticos: en el mundo, nuestra mejor marca internacional es el deporte”, expone.
Del techo de 22 medallas de Barcelona 1992 se ha pasado en los tres últimos ciclos a un decrecimiento que no escandaliza, pero que es constatable: 20 medallas en Atenas 2004, 19 en Pekín 2008, 18 en Londres 2012 y 17 en Río 2016. “Ya, pero la lectura de 300 clasificados y 17 medallas es incorrecta. Más del 50% de los deportistas que hemos llevado a los últimos Juegos volvieron con medalla porque hubo bastantes en deportes de equipo y un 54% estuvo entre los ocho primeros”, acota Blanco.
Tokio serán los Juegos que significarán, posiblemente, el adiós de una generación dorada: Pau Gasol (39 años), Rafa Nadal (33), Javier Gómez Noya (36), Saúl Craviotto (34)... “No estoy preocupado, es la vida. No hemos sido conscientes de lo que teníamos, y no habrá otro Nadal. Después de momentos maravillosos siempre hay un pequeño bajón, pero existe una buena planificación en el largo, corto y medio plazo y están saliendo jóvenes con resultados”, tranquiliza Blanco.
¿Y la situación política de interinidad ha afectado a la preparación? “Este año ha habido un aumento significativo del dinero para las federaciones, el Gobierno se ha portado. Y luego están las ayudas de Pódium de Telefónica, la UCAM o la Fundación Trinidad Alfonso. Pero cada vez más hay que hacer frente a un tsunami de competiciones deportivas y el dinero público ya no da. Hay que tener una buena ley, se llame de mecenazgo o lo que sea, para que las empresas privadas tengan ventajas al invertir”, relata el presidente.
Dinero. El ejecutivo de Pedro Sánchez había previsto subir de los 54,2 millones de euros de subvenciones directas a federaciones a 74, pero el rechazo de los presupuestos en el Congreso en febrero obligó a una prórroga. Aun así, desde el CSD se ha conseguido elevar, con convocatorias extraordinarias, las subvenciones hasta los 61. El 1% de los derechos audiovisuales de LaLiga ha permitido trabajar con más tranquilidad.
De ahí (con parte también de las arcas públicas) han salido 19 millones para participación internacional (7,7 fueron en 2018) y 4,8 para completar el ADO tras restar la cantidad destinada a sufragar la Seguridad Social de los deportistas.
También están las becas olímpicas ADO. “El modelo está vigente”, defiende el mandatario. Pero es innegable que hay que darle una vuelta para seducir a más empresas. Para 2008 se consiguieron 57 millones, 51 para 2012, 35 en el ciclo de Río y son unos 22 para Tokio. “Con más dinero, el ADO daba para otorgar becas a deportistas de futuro. Eso se perdió, pero logramos las becas Pódium (de Telefónica, que entrega 1.400 euros mensuales a unas 80 promesas), y de ahí ya fueron 22 a Río y salió un campeón olímpico como Marcus Cooper”, repasa.
Entre los equipos, ya tienen billete para Tokio los dos de waterpolo, el de baloncesto masculino... y el fútbol. Y con él no se apaga el debate de si debe estar o no en unos Juegos. El presidente del COE lo tiene claro, sí. “El fútbol no quita protagonismo a otros, porque precisamente en unos Juegos es donde la diferencia entre deportes es menor.
Vivir sólo de las medallas es un error; cada fin de semana hay éxitos”
Otros deportes no pierden protagonismo porque esté el fútbol”