El trial no es fútbol, pero aunque es un deporte minoritario la gente me conoce”

en ningún momento es una cosa que tengo muy presente y antes de cada cita me autopresiono mucho para no cometer errores. La motivación también es muy importante para llevar a buen término todos los objetivos ya que te hace ser muy competitivo. Busco en cada zona, en cada carrera sacar lo mejor y haciendo un paralelismo con el fútbol ir ‘partido a partido. Para un deportista es clave saber que te la juegas siempre y que en cada competición empiezas de nuevo.

—Y además tiene un equipo excepcional y estable...

—Exacto. Es muy importante la gente que tengo alrededor, que entrena cada día conmigo. Son parte de esa motivación para mejorar porque ellos la tienen para ayudarme. Seguir a un piloto como yo es exigente y difícil. Y, por supuesto, el trabajo de los mecánicos con la moto es súper importante para que sea estable, dé un gran rendimiento y te ayude a no cometer errores.

—Cambiando el tercio, ¿cree que sus éxitos tienen una justa repercusión en los medios?

—Hay que ser realista. Esto no es fútbol ni un deporte de masas. Yo tengo la gran suerte de estar en el Repsol Honda y eso hace que todo sea un poco más fácil. Aunque es un deporte minoritario, llevo ganando muchos años y la gente me conoce. Yo no me quejo y tengo una vida que me encanta. Soy conocido lo justo para ser reconocido pero me permite seguir mi vida tranquilo. A veces vas con otros deportistas y te das cuenta que la fama puede ser un poco agobiante.

—En unos días recogerá el Premio AS del Deporte. ¿Le ilusiona el reconocimiento?

—Viniendo de un deporte minoritario que me dé un premio un diario como AS para mí es algo muy grande que me ha costado muchos años conseguir. Estoy muy contento.

—Muchos deportistas aseguran que no miran lo que se dice de ellos en los medios. ¿Es éste su caso?

—A mí me encanta el fútbol y leo todos los periódicos, evidentemente el AS es uno de ellos. Me gusta ver todas las opiniones y soy de los que desayuno mirando todo lo que sale. Siempre los leo.

—Usted es hombre de retos. ¿Se ve corriendo el Dakar?

—No lo he pensado. Lo vería como una aventura y con lo competitivo que soy sería difícil para mí. Debes ir a coger velocidad, adaptarte al ‘roadbook’... Me gustan los deportes más agresivos en los que pasa todo más rápido como el Enduro indoor. Lo que le falta al trial es la velocidad y por eso muchos se pasan al enduro extremo. Sería una opción pero me gusta mucho lo que hago y cuando me retire será porque físicamente no puedo, porque no disfruto sobre la moto y ya no será momento de cambiar de disciplina... aunque nunca se puede descartar nada.

—Por último, ¿dónde se ve cuando llegue esa retirada?

—Me gustaría abrir una escuela y querría seguir vinculado al Repsol Honda en el mundo de las carreras. Tenemos muy buen rollo, llevamos trece años ganando juntos y se ha creado un gran vínculo entre nosotros.