Carlos lidera la remontada
De Tomás adelantó al Espanyol de penalti ● El Granada levantó el partido con asistencia y gol del delantero
Dio la asistencia a Machís y marcó un golazo para dar la victoria al Granada.
Falló en el segundo gol del Granada y no estuvo nada acertado en sus acciones.
Definió con calidad para poner el empate y fue un puñal en su banda.
Pudo ver la amarilla por sacar el brazo, se la mostró por una dura entrada.
Carlos Fernández fue el héroe del Granada. El delantero lideró la remontada ante un Espanyol que se adelantó con un polémico penalti sobre De Tomás. El propio delantero (cuatro goles en cuatro partidos) convirtió la pena máxima y obligó a los andaluces a hacer lo que hasta ahora nunca habían hecho en Liga desde la llegada de Diego Martínez: remontar.
Había mucho en juego y ambos lo sabían. Con poco fútbol y muchos parones empezó el encuentro. La primera fue nazarí, en un remate de Carlos que se fue fuera. Darder contestó con un tiro desde fuera del área a las manos de Rui Silva. Era el Granada el que intentaba tener más el balón, pero no conseguía, a pesar de tener la posesión, llegar a los dominios de Diego López. Y todo se puso cuesta arriba. Un robo a Yangel provocó una contra que acabó con un polémico penalti a De Tomás. Aunque el contacto fue mínimo, el colegiado ni fue a revisarlo en el VAR. RDT no falló ante Rui Silva. El Granada estaba tocado y el Espanyol pudo sentenciar. Primero Darder que, sólo dentro del área mando el balón incomprensiblemente fuera. Después el meta portugués paró el tiro de RDT. Hasta que, diez minutos después del 0-1, Carlos metió un magistral pase a Machís que, delante de Diego López, puso las tablas. El Granada, con el tanto, creció. Incluso Puertas, antes del descanso, pudo poner el 2-1. Con tablas se llegó al descanso.
En el primer balón del partido, Carlos Fernández la cogió escorado a la izquierda, se fue de su marcador y puso el balón en la misma escuadra. Golazo del sevillano que culminaba la remontada nazarí. Tocaba sufrir y Diego Martínez metió más músculo con Azeez, pero dio el balón y el dominio a un Espanyol que cada vez creaba más peligro. De Tomás se encontró con el palo en uno de los numerosos centros laterales. El Granada, parapetado y solidario, trataba de mantener el marcador y dejar que pasara el tiempo achicando balones. Y resistió para llevarse los puntos y acabar con la racha perica.
Machís El venezolano volvió a marcar para poner el empate