Calma con el coronavirus
Alejandro Blanco solicita cautela frente a la alarma global
El coronavirus también afecta al deporte. Múltiples eventos se han tenido que aplazar o cancelar por temor a un contagio masivo que provocase su expansión por todo el mundo. Los primeros casos en Japón están apareciendo, y eso a 168 días de los Juegos de Tokio 2020 comienza a generar intranquilidad en el seno de la familia olímpica. Ayer, tras la presentación del programa Todos Olímpicos, Alejandro Blanco, presidente del COE, procuró mandar un mensaje de calma.
“Me preocupa, pero tengo seguridad. Hay que recordar lo que ocurrió con el zika en Río 2016. El primer interesado en tomar las medidas necesarias para que no haya ningún riesgo de contagio es el Comité Olímpico Internacional. Estamos hablando de un evento al que van millones de personas. Por eso, dispongo de la certidumbre de que no existirá peligro en caso de que este brote continúe. Debemos estar tranquilos y ser conscientes que el COI tomará las disposiciones necesarias para que todo se desarrolle con seguridad. Hasta que no se reciban todos los informes no se puede comentar qué ocurrirá, pero estoy convencido de que no habrá riesgos. Por tanto, hasta adoptar las medidas necesarias es importante mandar un mensaje de absoluta tranquilidad para que no cunda el pánico entre los deportistas”, apuntó Blanco.
El presidente del COE tampoco quiso alarmarse por las preparaciones que algunas federaciones han organizado para los próximos meses en Japón. “Salvo los Preolímpicos que se han suspendido en China no ha cambiado nada más. Esta mañana (por ayer) mantuvimos una reunión sobre Tokio y nadie varía sus planes. Debemos ir día a día, ya que vamos por detrás de los organismos médicos internacionales.
Los deportistas deben estar centrados en cuándo deben competir y saber que los que tienen que tomar las decisiones sobre el tema lo están estudiando y haciendo”, zanjó.
Otro tema de actualidad es el del abanderado en Tokio. Mireia Belmonte alzó la mano, y Blanco también fue tajante. “La norma es la norma y dice que debe ser abanderado el deportista que más medallas tenga. En ese baremo, Saúl Craviotto es primero, después Mireia Belmonte y en tercer lugar Lydia Valentín”, concluyó.
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