Fiesta grande en Bilbao
La afición del Athletic recibió por todo alto a los finalistas de Copa, pese al temporal
EI día era de perros ayer en Bilbao, pero casi pasó desapercibido el granizo y el viento siberiano para la gente, embriagada aún de éxito por la clasificación del Athletic para la final de Copa de Sevilla el 18 de abril. Yuri obró el milagro en Granada y se desató la locura en la zona visitante del Nuevo Los Cármenes y en las vías céntricas de la capital vizcaína. La noche fue muy larga.
Hubo 100 aficionados que despidieron al equipo a su salida de Lezama el jueves, el día del partido, y la gente volvió a estar presente ayer en el regreso de la expedición al aeropuerto de Loiu, a las 11:30 horas, y también a las instalaciones rojiblancas, donde la plantilla se ejercitó suavemente. Casi 300 seguidores corearon el cántico de moda: “Lolorololololo, Aaaaathletic Club”, mientras agitaban las bufandas. En el vestuario de Los
Cármenes hasta tiró de trompeta Villalibre. Se hizo un pasillo en el aeropuerto y luego se tributó un homenaje a la llegada al aparcamiento de Lezama.
La celebración comenzó en el mismo terreno de juego de Los Cármenes. Los leones lo festejaron por todo lo alto con la hinchada y familiares. Sobre todo Yuri, con su hijo Luka y su mujer. Y siguieron en el avión que les trajo ayer de vuelta a casa. Se trata de una final inédita entre Athletic y Real, los dos grandes equipos vascos, y recibieron la felicitación del lehendakari, Urkullu.
Yuri, autor del gol que valía una final, fue el más aclamado junto con Aduriz, que sueña con cerrar su carrera con un título. “Es el gol más importante de mi carrera”, confirmó el lateral. Los seguidores animaron a los futbolistas con cánticos a su salida al campo de entrenamiento y durante buena parte de la sesión. La plantilla rojiblanca se encierra ya hoy en el último entrenamiento previo al partido frente al Valladolid.
Cada club dispondrá de 21.000 entradas para la final. Lo más probable es que en ambos casos haya que realizar sorteo entre una masa social de 35.000 aficionados en los donostiarras y 43.555 en los bilbaínos. La RFEF se reservará unas 14.000 para sus patrocinadores y compromisos. Las otras cuatro mil, hasta las 60.000 totales de La Cartuja, no se venderán por seguridad. En las últimas ediciones los precios de las localidades han oscilado entre 50 y 140 euros. No es seguro que en Bilbao pueda emplearse la gabarra en caso de ganar, por razones de seguridad.
Gabarra No es seguro que pueda usarse si ganan los leones