AS (Las Palmas)

Parejo “Me queda cuerda para pelear por la Eurocopa”

- C. VALLE /

¿Cómo lleva un futbolista, más siendo el capitán, que el 35% de su vestuario haya dado positivo por coronaviru­s? —Tenemos que tomarlo con calma. El club ha hecho todos los esfuerzos posibles para evitar contagios, fue incluso por delante de las medidas oficiales, pero aun así no se pudo evitar. Toca estar al lado de los afectados, animarles y confiar en que todo saldrá bien.

—Ustedes, por ser pioneros en la toma de medidas tras el viaje a Milan, son un ejemplo de que lo mejor es quedarse en casa.

—Sí, nos ha tocado muy de cerca y por eso estamos tan conciencia­dos. Toda Europa debió aprender de lo que sucedió en China. Hay que hacer caso a las autoridade­s y quedarse en casa, que es el modo más seguro de frenar la transmisió­n y ayudar así a los que se están jugando la vida por nosotros.

—¿Ha pensado qué tocó o con quién estuvo en Milan?

—Estos días tienes tiempo para dar vueltas a la cabeza y plantearte todo lo que hiciste. Muy poca gente habla de lo expuestos que estábamos los jugadores y los trabajador­es del club en esa eliminator­ia.

—El Atalanta-Valencia se califica de “bomba biológica”. ¿Da vértigo pensarlo?

—Da mucho respeto, pero nosotros sólo cumplimos con nuestra obligación. Hablar ahora es ventajista, pero tal vez no debía haberse jugado ni siquiera aquella jornada de Champions. De lo que estoy seguro es de que la eliminator­ia no se jugó en igualdad de condicione­s.

—¿Confía en terminar LaLiga?

—Todos los jugadores queremos que se termine, pero no a cualquier precio. Lo primero es la salud y la seguridad de todos. Desde el primer aficionado hasta el último jugador. Cuando se pueda garantizar, entonces volvamos. Y tenemos que hacerlo en las mejores condicione­s. No podemos descuidarn­os estos días. Hay que ser responsabl­es y trabajar, comer y descansar como nos indica el club.

—¿Cómo les afecta físicament­e este parón?

—Es algo extraño. Nunca habíamos parado a estas alturas un mes, como mínimo, así que hay que ir adaptándos­e a la situación. No es sencillo, pero con profesiona­lidad podemos regresar todos en condicione­s. Es evidente que luego necesitare­mos unos días para coger el tono y el ritmo de competició­n, pero será más sencillo si en nuestras casas cumplimos.

—¿Cómo es su día a día?

—Yo lo estoy intentando aprovechar para pasar mucho tiempo con mis hijos y mi mujer, y para aprender cosas nuevas. Quiero que esta cuarentena sea productiva para mí a nivel personal. Vamos a aprender muchas cosas de la vida y también cosas de andar por casa. Nunca es tarde.

—-Hablando de hacerse tarde, ¿teme que la Eurocopa se le pueda escapar? Tendrá 32 años.

—No. Me gusta cuidarme y todavía me queda cuerda para rato. Soy de los que más minutos juegan y, afortunada­mente, no me resiento ni lo pago con lesiones. Espero terminar este año a un buen nivel y lograr estar en Champions.

La temporada que viene la afrontarem­os del mejor modo posible. Si hago las cosas bien en el Valencia, seguro que tendré opciones.

—¿Se ve en la Champions?

—Confío en el equipo, en la capacidad de lucha y en que si competimos como sabemos vamos a estar ahí. Depende de nosotros porque estamos cinco equipos en cinco puntos y aún quedan 33 en juego y enfrentami­entos directos. No va a ser fácil, pero quiero jugar la próxima Champions y voy a dejarme la piel por conseguirl­o.

—¿Ve justo ahora que se focalicen las críticas en Celades?

—Nunca es justo que se focalicen las críticas en una persona. En un equipo de fútbol, ganamos y perdemos todos. Jugadores y cuerpo técnico. Todos compartimo­s méritos y tenemos nuestra parte de responsabi­lidad. Igual que lo digo del míster, lo digo de cualquier compañero. Cuando nos meten goles es responsabi­lidad de todos, no sólo de los defensas. Y lo mismo cuando los metemos. Somos un equipo y es fruto del trabajo de todos.

—¿Entiende que no se haya fichado a nadie por Garay?

—Todo el mundo sabe que el club siempre intenta mejorar. Se intentó fichar, pero, si ya es difícil encontrar a jugadores del nivel del Valencia, las limitacion­es del reglamento convierten la misión en todavía más

complicada.

—¿Tiene explicació­n a tanta lesión?

—No soy médico ni preparador físico, pero las lesiones afectan a todos los equipos, sobre todo los de Champions. La mala suerte es evidente con Piccini, Garay o la varicela de Florenzi. Cuando por mala suerte se reducen efectivos, hay menos opciones de rotaciones y eso supone un sobreesfue­rzo para el resto. Mentalment­e nos ha enseñado a ser más fuertes.

Milán “Casi nadie habla de lo expuesto que estaba todo el equipo allí”

Celades “Nunca es justo que se focalicen las críticas en una persona”

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Dani Parejo envió a AS esta fotografía desde su domicilio en Valencia, donde pasa el confinamie­nto.

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