Actores chinos hicieron de hinchas norcoreanos
La imagen de más de 1.000 aficionados apoyando en el Ellis Park a la selección de Corea del Norte fue de las más llamativas de todo el Mundial
Que el paso de Corea del Norte por Sudáfrica no iba a pasar desapercibido era algo que se rumiaba desde que la selección norcoreana se clasificó unos meses antes para el Mundial, 44 años después de su última participación en una Copa del Mundo. El aislamiento político del país, su estructura gubernamental totalitaria y sus caractarísticas militªres y sociales hicieron que fueran muchas las miradas que apuntaban a la expedición chollima, poco acostumbrada a ponerse delante de las cámaras y los focos.
Su debut ante Brasil fue sorprendente. Estuvo muy cerca de lograr un empate ante la gran favorita y llamó mucho la atención la cantidad de aficionados asiáticos que apoyaron en el estadio Ellis Park a la selección de Corea del Norte. Más de 1.000 hinchas apoyaban en las gradas al equipo norcoreano con camisetas y banderas de la selección, una imagen inesperada, ya que por las circunstancias políticas del país, para un ciudadano común resulta casi imposible poder comprar un billete de avión a Sudáfrica y lograr un visado para salir de su nación.
Pero todo tenía una explicación. Según informó entonces el diario británico The Telegraph, la oficina en Pekín del Comité Deportivo de
Corea del Norte había dado entradas a ciudadanos chinos para que estos se hicieran pasar por aficionados norcoreanos. Fue una de las noticias más curiosas del Mundial. En la mayoría de crónicas tras el encuentro ante Brasil, los hinchas que apoyaron a Corea del Norte tuvieron casi tanto protagonismo como el juego de su selección. "El entusiasmo en la grada se vio reflejado en el juego de un equipo que antes de comenzar, tenía muy poco a los aferrarse ante la pentacampeona del Mundo", se podía leer en el rotativo inglés.
Lamentablemente para Corea del Norte, su selección quedó encuadrada en el denominado "grupo de la muerte", en el que además de Brasil estaban Portugal y Costa de Marfil. La buena imagen que dejó el equipo asiático ante la canarinha se esfumó en los dos siguientes encuentros, en los que cayó por 7-0 ante los lusos y 3-0 ante el conjunto africano.