La Roma cambia de dueño
El Grupo Friedkin compra el club de la capital italiana por 591 millones de euros
la Roma, nuestro compromiso es total. Estaremos muy presentes en la ciudad, que ocupa un sitio especial en nuestros corazones”.
James Pallotta, por su parte, dice adiós después de ocho años con un innegable crecimiento económico, pero también repletos de críticas y polémicas. Se va sin ganar ni un título, algo que el club añora desde 2008. La cima de su presidencia fue la increíble remontada con el Barça, y el ya expresidente se despidió así: “Solo quiero desearle a Dan, Ryan y a todo el club, mucha suerte para su futuro. Como todos los hinchas de la Roma en el mundo, deseo que The Friedkin Group pueda llevar al equipo al siguiente nivel. Dejo aquí muchos recuerdos inolvidables”.
A la capital italiana llega un grupo muy poderoso: Forbes afirma que el patrimonio de Friedkin supera los 4.300 millones de dolares y la más valiosa de sus empresas es la Gulf States Toyota Distributors, distribuidora de vehículos y componentes Toyota en los Estados Unidos. El primer objetivo, sin embargo, será arreglar las cuentas con un plan a largo plazo que le dé solidez a la entidad. En este sentido, será fundamental la construcción del nuevo estadio: Friedkin continuará el proyecto de Pallotta para el nuevo y moderno campo giallorosso en la zona de Tor di Valle.
Mientras tanto, justo ayer llegó la primera cara de esta nueva Roma: Pedro. El ex del Barça aterrizó por la mañana en el aeropuerto de Ciampino, en estos días se someterá a varios test médicos (cuya duración dependerá de la evolución de su lesión en el hombro) y firmará un contrato de dos temporadas, con opción para otra más. Su llegada coincide con el día en el que cambió la historia de la Roma. Cuando se dice comenzar con buen pie…