El Espanyol persigue el tren del ascenso directo
Appiah y Dimata, preparados para debutar
Celebraba el Espanyol su Copa del Rey conquistada en Mestalla y cerraba el Lugo una anodina campaña en Segunda B cuando Diego López abandonaba, con la mayoría de edad recién cumplida aquel verano de 2000, el club de su vida para probar suerte en todo un Real Madrid. “Tenía que trabajar no el doble ni el triple que los demás, sino más”, recordaba recientemente en AS. Hoy el portero regresa sorprendentemente por primera vez al Anxo Carro como veterano de un Espanyol que se juega mucho más que tres puntos en un escenario convertido en inexpugnable.
Desde la llegada de Nafti en la sexta jornada, no ha perdido en el Anxo Carro el Lugo, que en la primera vuelta le plantó cara a los pericos en Cornellà y que por su soltura como local transita con calma por Segunda. Para afianzarse, aparte de la vuelta a la titularidad del Puma Rodríguez y las dudas de Chris Ramos y Gerard Valentín, cuenta desde hoy con Arvin Appiah.
Tendrá el agente doble, pues está cedido por el Almería, competencia en otro delantero debutante, Landry Dimata, que viajó anoche a Lugo y que apunta también al banquillo. El regreso de David López tras cumplir sanción y la ausencia de Sergi Darder por idéntico motivo son las otras novedades de un Espanyol que ha caído del ascenso directo y al que urge imperiosamente ganar después de tres derrotas en cuatro jornadas.