AS (Las Palmas)

Con sabor a una final

El Atlético considera una obligación vencer al Levante

- F. J. DÍAZ / LA PREVIA

EI Levante vuelve a cruzarse en el camino del Atlético, esta vez en el Wanda Metropolit­ano. El líder aprovechó a medias el partido que tenía aplazado frente al conjunto granota. Los más optimistas verán que la distancia aumentó con respecto a sus perseguido­res. Los pesimistas dirán que sólo valía ganar los tres puntos. La realidad es únicamente una: el Atlético le saca seis al segundo, Real Madrid, y sigue teniendo un partido menos. A partir de ahí cada uno que haga la lectura que quiera o la que más le interese. El equipo de Simeone retorna a su estadio, donde está muy fuerte. De once partidos ligueros sólo ha cedido dos empates: Villarreal y Celta. El resto, triunfos. El Levante, por su parte, baja algo las prestacion­es cuando juega fuera del

Ciutat. Ha ganado dos encuentros de once como visitante en el campeonato, pero el último triunfo fue ante el Real Madrid. Como para no relajarse.

Y no puede hacerlo el líder de LaLiga. En el Ciutat tuvo la pelota, el juego y las ocasiones. Muchas. Pero no perdió por una mano salvadora de Oblak al final del partido. El Levante ofreció señales de encontrars­e casi entregado, pero aguantó y rentabiliz­ó su juego. Buen equipo el de Paco López, quien no tendrá por lesión a Radoja. El entrenador del Levante sólo tiene a Malsa en el medio y tendrá que inventarse algo para fortalecer esa parcela central.

Simeone, por su parte, también pierde jugadores: Savic y Saúl, por tarjetas, y Carrasco por lesión de última hora. Dembélé y Herrera siguen inactivos por el coronaviru­s; Trippier no puede jugar por su sanción. El técnico argentino recuperó a Lemar, pero el once es un rompecabez­as: Vrsaljko, Kondogbia y Giménez no se entrenaron y el croata tampoco va convocado. El equipo está pillado con alfileres. Simeone podría cambiar de sistema para equilibrar sus fuerzas. Las molestias de Kondogbia dan opciones a Torreira e incluso Lemar podría salir de inicio. El once será de garantías, el banquillo...

El Levante lo fiará todo a su velocidad en la salida de balón, a esas transicion­es rápidas en busca de la portería rival. Le hizo daño al Atlético así y repetirá. Un equipo madrileño que lleva seis partidos seguidos en LaLiga encajando. Ahora prácticame­nte cada disparo de un rival significa gol. El fútbol es cuestión de rachas y le ha llegado al conjunto madrileño la de encajar en todos los partidos.

El Atlético necesita ganar para, como mínimo, mantener la ventaja con sus perseguido­res. Gil Marín, consejero delegado del Atlético, estuvo en Majadahond­a animando a la plantilla. Sólo se pasa por allí la previa de los días importante­s. La idea es clara: con lo puesto o con lo que tenga Simeone, pero hay que ganar. Es la primera final. A la vuelta de la esquina esperan Chelsea (con el viaje a Bucarest), Villarreal y Real Madrid. Por eso ganar al Levante es poco menos que una obligación.

Ausencias Simeone tiene el equipo cogido con alfileres tras perder a Carrasco

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