El Alavés negocia con Javi Calleja tras la enésima debacle

Nolito, Aspas y Santi Mina, letales

Al Celta le bastó la primera parte en Vitoria, más bien 20 minutos, para dejar claro que el Alavés es una ruina absoluta. Abelardo quedó sentenciado y el club negocia con Javi Calleja. Y eso que empezó mejor en Mendizorroza. Llevaba la iniciativa y se asomaba por el área celeste.

En realidad, el primer tiro en el pie se lo pegó, una vez más, el Pitu con la ausencia de Lucas en la convocatoria. El club no tiene dinero para muchas aventuras. Hay un juicio pendiente con Asier Garitano que, si se cumple la lógica, ganará el técnico del Leganés. También hay que pagarle a Machín, que fue cesado en enero tras caer contra el Cádiz. Si se echa a Abelardo y se trae a Calleja, habría que pagar el sueldo de cuatro técnicos en una sola temporada. También es cierto que Querejeta, que es el que toma las decisiones, no tiene mucha paciencia.

El conjunto albiazul es un flan en defensa. Lejeune, muy desafortunado, perdió un balón que intentaba sacar jugado y, con un Pacheco poco fiable con el pie y a media salida, llegó el 0-1. Corría el minuto 8 pero es que Aspas en el 14’ y Santi Mina en el 20’, colocaron el 0-3 cuando apenas se aproximaba el ecuador de la primera parte. A partir de ahí, nada de nada en ataque, un doble cambio sustituyendo piezas y un balón más al palo del Celta. Nolito pudo hacer el 0-4 tras otro regalo de Lejeune. Murillo dejó a su equipo con diez efectivos en el 54’ con una segunda amarilla muy rigurosa. Pero ni con esas. En el minuto 86 maquilló un poco la cosa Lejeune. Los tres mosqueteros dejaron su huella.