Las 48 horas más duras de Julen Lopetegui
Así vivió su delicada situación
Lopetegui tiene las horas contadas en Sevilla. Lo sabe todo el mundo y también él. El jueves llegará otro técnico y Julen dejará de dirigir al equipo tras tres clasificaciones consecutivas para la Champions, una Europa League conquistada y la mejor temporada del club a nivel de puntos en la historia.
El final de trayecto ha sido especialmente ingrato. Hace 10 días ya sabía que el club estaba en contacto con otro técnico. El proyecto se fue hundiendo mucho antes que en este desenlace. La marcha de pilares básicos de su plantilla como Koundé, Diego Carlos u Ocampos descompuso su columna vertebral, en la que solo se mantuvo Fernando y con problemas de salud que mermaron su nivel.
Aun así, el sentimiento de pertenencia, de escudo, de respeto hacia el Sevilla y el sevillismo le han llevado a dar el do de pecho hasta el final. “No voy a hablar de lo que ha pasado estos últimos meses. Hay que ganar mucho para estar 169 encuentros, mañana (por hoy) es el 170. Voy a ser fiel a lo que he hecho porque he de estar a la altura de las circunstancias de este club y de su afición”, dijo ayer.
Las últimas 48 horas fueron especialmente duras. Al día siguiente de caer ante el Atlético se vio completamente aislado, junto a su cuerpo técnico, en el entrenamiento posterior al partido, el primero antes del Dortmund.
Pese a ello, siguió preparando el duelo a conciencia, analizó al dedillo a su rival, hizo énfasis a sus jugadores sobre lo que debían mejorar. Lopetegui se irá del Sevilla y habrá que ver cómo les va al uno y al otro. La historia fue intensa hasta el final, tanto en el éxito como en la decepción. Así acaba la era Julen.
Profesional Preparó el partido de hoy al 100%, a pesar de verse fuera