Cholismo frente a Iraolismo
El Atleti mide su recuperada identidad ante el Rayo
PATRICIA CAZÓN / LA PREVIA
Yel cholismo regresó cuando el Atlético más lo necesitaba. Ese equipo serio, comprometido y sin fisuras. El unocerismo como forma de vida. El gol de Griezmann, la solidez defensiva con Reinildo convertido en la reencarnación de Arteche o Godín, aunque su posición sea la del lateral izquierdo. Sin tiempo apenas de digerir esa mejoría que se palpa desde el partido ante el Brujas (aunque en ese caso sin la victoria añadida), los rojiblancos disputarán esta noche el tercer derbi de la temporada, ahora ante el Rayo.
La estrechez del calendario manda, aún más asfixiado por el
Mundial en unas semanas. Partidos martes, domingo. Y pendientes de la enfermería. Porque Simeone lo está con un hombre en duda más allá de los lesionados (Felipe, Llorente y Reguilón): Jan Oblak, que hoy estará pendiente de una última prueba para ver cómo está de la conmoción que sufrió en San Mamés, y el golpe en el hombro, y si ocupa la portería él o lo hace Grbic. Koke es baja segura, lesión muscular, y João está disponible.
El Rayo afronta su segundo derbi consecutivo con la ambición de hacer bueno el punto del Getafe y de sacarse la espina de la pasada temporada. Un brote de COVID lo mermó entonces y ahora acude al Metropolitano con ganas de demostrar su potencial. La maratón de partidos obligará a Iraola a rotar. Sin embargo, éste apostará más por pequeños ajustes que por un cambio radical. Algún retoque en la medular, las bandas.
La baja de Trejo, por su lesión en la mano, condicionará los planes de Iraola, que cuenta con varias alternativas para suplirle: desde las más naturales como Unai López o Pozo a otras más remotas como adelantar a Comesaña o contar con Nteka, fuera de la lista la pasada jornada. Desde que ganara en Cornellà, el Rayo cuenta sus salidas por derrotas (El Sadar, San Mamés y Almería) pero acude al Metropolitano con el Camp Nou en la cabeza, donde arañó un empate. Su juego rápido y vertical, donde las bandas tienen mucha importancia, será el rival a batir por el recuperado cholismo.
El once del Cholo es incógnita. Con la defensa inamovible, en el centro del campo pueden entrar Kondogbia, que debería ser fijo, va a exhibición por partido, y Witsel. Griezmann parece insustituible para el Cholo pero Correa, que no jugó en San Mamés, también pide su sitio. Y João podría ser titular para enterrar del todo la polémica de sus suplencias y falta de minutos en las últimas semanas. Incógnitas alrededor de una certeza: el Atleti es más fuerte cuando es fiel a sí mismo, cuando es cholista.