Alavés y Sporting firman tablas y siguen invictos
La Primera División volvió a Vitoria diez años después
Las peñas del Alavés recibieron a los dos equipos con una pancarta en la que se podía leer: “Has dadila Festa” (“Que empiece la fiesta”, en euskera). Mendizorroza volvió a acoger, diez años después, un partido de Primera entre dos contendientes que venían de obtener magníficos resultados en la jornada inicial.
El Alavés comenzó con muchos bríos. Antes del primer minuto, Ibai Gómez ya había lanzado un gran disparo por encima de la portería de Cuéllar. Theo y Deyverson también estuvieron a punto de desnivelar el marcador gracias al juego combinativo y al peligro que llegaba por las bandas. En la medular, Marcos Llorente se ofrecía y casi todas las jugadas comenzaban en sus botas.
Pero, poco a poco, el Sporting se fue soltando y equilibró la balanza. Moi y Burgui tenían profundidad en la línea de tres cuartos y Víctor también pudo poner a los suyos por delante. Para entonces, el protagonismo de Munuera Montero ya era evidente y no contentaba a ninguno de los dos equipos. Acertaba con las apreciaciones técnicas, pero fallaba estrepitosamente en materia disciplinaria. En el minuto 37 pudo expulsar a Deyverson por una entrada a destiempo sobre Amorebieta, pero prefirió mirar para otro lado. Sin embargo, era condescendiente con algunas acciones merecedoras de tarjeta amarilla.
Tras el descanso, los asturianos fueron cogiendo el control del choque y consiguieron intimidar. El Alavés se sentía muy incómodo y no aprovechaba las escasas ocasiones que le ofrecían los rivales. Un cabezazo de Santos y un remate de Toquero, al que respondió Cuéllar con una gran intervención, fueron las más claras. El partido fue languideciendo hasta el minuto 95 y terminó con reparto de puntos. El Alavés se queda con dos y el Sporting suma ya cuatro en las dos primeras jornadas del campeonato.
“Que empiece la fiesta”, decía la pancarta con la que las peñas recibieron a los dos equipos