Luis Enrique se fue sin decir adiós al Camp Nou

“Vine para ser un líder y lo he sido”, resumió el asturiano

Una vez el estridente speaker del Camp Nou acabó la presentación del equipo, el Camp Nou atronó aplaudiendo el nombre del aún entrenador azulgrana. Luis Enrique recibió un homenaje de la grada que él dudaba que se hiciese de manera espontánea. “No sé qué piensan de mí”, afirmó ante los medios en la sala de prensa de la Ciutat Esportiva. “No suelen regalar elogios”, dijo el entrenador una vez acabó el partido y se supo que el Madrid había conquistado la Liga. El entrenador se fue sin despedirse de la grada del Camp Nou, aunque el Barça trató de cuidar hasta el último detalle para conseguir una sonrisa del técnico asturiano.

“Si no sale Luis Enrique no me voy de aquí”, se cantó desde el Gol Nord. Antes se desplegó una pancarta gigante desde la zona del lateral y se emitió un vídeo que destacaba las mejores imágenes del asturiano durante estos tres años. Per sempre, un dels nostres (“para siempre, uno de los nuestros”), rezaba. Además, en la Grada d’Animació se hizo una especie de coreografía con cintas azulgranas y dos pancartas: una que fue descolgada con dos fotografías de Luis Enrique y otra que rezaba Sempre seràs un dels nostres.

Luis Enrique fue alternando desde el banquillo como siempre con Juan Carlos Unzué para dirigir al equipo. En esas, de manera espontánea, el Camp Nou coreó su nombre. Se agarró muchísima gente, incluso miles de turistas que una tarde más aprovecharon para pasar el rato en el estadio sin saber bien de qué iba lo que estaba pasando. Para el preparador la procesión debería ir por dentro. “Las sensaciones fueron las que siempre; ya dije que a mí no debían animarme, ya que ni fallo pases ni goles”, remarcó.

“Vine para ser un líder y lo he sido. Sin el equipo no habría ganado título. Me he ido cuando lo he considerado oportuno”, insistió Luis Enrique, aclamado en su adiós como entrenador por la grada, aunque él no le dio importancia a eso.

Último día Pancartas, tifo y cánticos en un adiós discreto del asturiano

HOMENAJE. Luis Enrique intentó pasar desapercibido el día de su adiós en el Camp Nou. Con una pancarta, la afición le agradeció sus tres años como técnico culé.