Retransmisión vibrante y fiestón por la Liga blanca
Movistar+ Partidazo y beIN LaLiga se volcaron
Un carrusel de emociones trepidante. La retransmisión de Movistar+ Partidazo y beIN LaLiga de los dos partidos clave resultó emocionante desde el minuto uno hasta el final. Y eso que la intriga quedó resuelta bien temprano.
Movistar+ Partidazo, que escogió el Málaga-Real Madrid, arrancó con imágenes de otras temporadas con finales intensos: las ligas de Tenerife, el penalti de Djukic, el gol de Kiko para el Atleti, Donato para el Depor, Ronaldo para el Madrid... Cristiano apenas tardó dos minutos para entrar en tan selecto club y lo celebró a lo grande.
BeIN LaLiga, que ofreció el Barça-Eibar, mostraba entonces la sonrisa cómplice de Unzué y Luis Enrique al enterarse del gol en La Rosaleda. Y antes del pitido inicial, otro momentazo: las últimas indicaciones de Míchel a Sandro dentro del vestuario.
La acción volvió pronto al Camp Nou con el gol de Inui y la decepción de Messi y Ter Stegen. Y Movistar+ Partidazo abría una ventana para ofrecer las imágenes de Barcelona.
La alegría blanca se disparó con el gol de Benzema en fuera de juego y que la repetición aclaró. Y con el pitido final y el abrazo con más morbo entre Míchel y Zidane, la fiesta se desató. El corro de los jugadores, Marcelo con una bufanda en la cabeza, la celebración de todo el equipo con la afición blanca desplazada a Málaga... La noche acababa de empezar.