“Me dejaré hasta la última energía para ganar el Giro”
Nairo Quintana
¿Satisfecho con la escasa renta que lograron sobre Tom Dumoulin?
—Mejor esos 15 segundos que nada. Lo intentamos, hicimos todo lo que pudimos, y al final lo que conseguimos fue un poco más de tiempo. Los que marchamos por delante nos pusimos de acuerdo para colaborar, ya que por detrás Dumoulin venía fortísimo. Es un gran rodador y se defendió de forma brava.
—¿Confía en verse de rosa en el cajón de Milán?
—La crono, llana y de casi 30 kilómetros, es para especialistas. Espero defenderme bien, aunque no tengo tanta ventaja con los rivales. A veces me salen buenas contrarreloj, quizá sea un buen día para mí. Se trata del último esfuerzo y de la maglia rosa, no me queda otra.
—¿Qué espera?
—El nivel estuvo muy parecido a lo largo de las tres semanas. Las diferencias no son demasiado grandes, y tampoco lo serán al terminar la ronda. Ojalá que la fatiga juegue a mi favor.
—Entonces, ¿ganará el Giro 100?
—Tengo la ventaja de que voy primero. A eso vinimos, a conquistar la camiseta rosa. Por mi parte, me dejaré hasta la última gota de energía para mantener esta maglia. Lo importante, que dispongo de fuerza y motivación. Sólo falta que la suerte me acompañe.
(Muchísimo más pesimista se mostró Eusebio Unzué, mánager del Movistar, que considera a Tom Dumoulin el triunfador virtual: “Requeríamos unos dos minutos o más para afrontar con cierta tranquilidad la crono de Milán, y no los logramos pese a que lo probamos hasta el puerto final de la competición. Todos rindieron muy parejos en la montaña, donde en otras ocasiones resultamos más determinantes. Qué se le va a hacer, se hizo todo lo que se pudo desde que partimos de Cerdeña”).
—¿Qué cambiaría si echa la vista atrás?
—No miro atrás, mi cabeza dice que debemos vencer. Miedo no hay. Puede ocurrir la derrota, aunque también la victoria. Existen algunos días, más de uno, que borraría de este Giro. Al no llegar al cien por cien para conseguir los objetivos, cojo el gran trabajo del equipo y que se ha dado todo como lo mejor de esta competición.
—¿Hubo entendimiento cuando se quedaron cinco en cabeza o se escaquearon en los relevos? —Me habría gustado obtener mayores diferencias. Yo hice lo máximo. Los adversarios también debían tirar más fuerte. No sabemos si con más convicción hubiéramos logrado más ventaja y habrían consolidado el podio, como tampoco me lo asegura nadie a mí este domingo.
—¿Cuesta correr con el cartel de candidato número uno al triunfo final? —El pago de presentarte como aspirante a cada prueba es que los demás se enfrenten a uno mismo y al Movistar. Se lleva con naturalidad, aunque cuesta y nos defendemos lo mejor que podemos con el respaldo de los compañeros, a quienes agradezco siempre el sacrificio que realizan por mí.
Animado
“No miro atrás, mi cabeza dice que debemos vencer. Miedo no hay”