Único precedente: Venezuela, en 1982
■ El 31 de mayo de 1982 se disputó el único Clásico en suelo extranjero hasta hoy, un partido del que muy pocos se acuerdan. Ni los que lo jugaron. Fue en Venezuela, improvisado y ante apenas 700 espectadores. Entre ellos, Di Stéfano. Un
Madrid-Barcelona enterrado en el polvo de la historia.
“Me acuerdo de poco, sé que marqué yo el gol porque me lo recordásteis vosotros (la Prensa) pero ni idea”, relata a AS, con dificultades, Del Bosque. Las escasas crónicas dicen que fue de cabeza al rematar un córner. “Puede ser…”, reconoce riendo. Aquel ‘bolo’ quedó como una nota al pie en la larga historia de los Clásicos por varios motivos. “Vino Alfredo porque al año siguiente se incorporaba como entrenador, pero no teníamos a los internacionales y el Barcelona estaba fichando a Maradona así que… Era otra época”.
El Clásico de hoy se desarrollará en medio de un show que durará cuatro días, el de entonces ‘se arregló’ casi sobre la marcha. No había reglamento para el cuadrangular que disputaron los dos gigantes españoles, Inter y Oporto en la Copa del Presidente Luis Herrera. Al perder ambos, madridistas y culés, se organizó un tercer y cuarto puesto entre ambos que no constaba en la agenda. El madridista San José tampoco echa más luz. “No recuerdo si jugué siquiera”, comenta. “Hay que entender que aquellos años le dábamos casi más importancia a los derbis contra el Atlético”. Lobo Carrasco, uno de los integrantes del once azulgrana, lo guarda en la memoria… por el calor. “Entre el calor y la humedad que hacía, cada hora y media teníamos que ir al hotel a ducharnos para refrescarnos”.
Por no haber, no hay ni imágenes ni vídeo. “Lo grabó Canal 8, la TV estatal venezolana, pero cuando acudí hace no mucho a sus archivos a preguntar por el partido, me dijeron que el film estaba dañado”, nos explica Eliezer Sebastián, periodista venezolano y estudioso del fútbol de su país. “Lo curioso es que hubiera sólo 700 personas, si se hubiera jugado en Caracas quizá hubiera sido diferente…”. Hoy lo verá el mundo entero.