“Este local hace un mes era una peluquería...”
Mil litros de cerveza y 400 kilos de carne: así esperan el partido los bares
Hace un mes, lo que había en la calle Suecia, número 106, era una peluquería. Ayer, donde una vez hubo espejos, secadores y peines había una barra de bar. Encima un nombre, La previa, y todo el suelo lleno de envoltorios, papeles y latas, muchas latas, de cerveza, refrescos. Ayer recibieron la licencia. Hoy se estrenan. “Vamos, como el Wanda Metropolitano”, bromean.
“Queríamos que tuviera un aire industrial...”. Abrirán todos los días, quieren que el cliente no sólo sea aficionado del Atleti, los días de partido. Pero el corazón tira. Su Atleti. Lo llena todo. Paredes, sus colores. “Los que mejor quedaban eran estos...”. Rojo, azul y blanco. El Atleti está hasta en los dibujos de la puerta de los baños: dos Playmóvil, ella, él y sus escudos.
Su historia, de la mano con el estadio, en obras, apuros, turnos de 24 obras, tiene mucho que ver con la del nuevo estadio rojiblanco. “Hemos terminado a la vez”, sonríen. De profesión anterior la cocina del Hotel Mirasierra, esta tarde prepararán bocadillos fríos. “La cocina aún está embalada”. Todo ordenado, con mucho gusto, prepararán bajo los soportales una terraza de doce mesas. “Y mil litros de cerveza”, apunta Guille, uno de los dueños. En esas cifras están más o menos todos los bares alrededor del estadio.
“Como no sabemos muy bien nosotros tenemos preparados 1.500”, cuenta uno de los dueños de El Churretón, en la Glorieta de Arcentales, ese que abrió hace tres meses. Dos locales más allá hay ya otra obra proyectada: será una pizzería, el local de al lado no saben pero también está cogido ya. “Quizá abran una tienda de tatuajes”. Desde que abrieron Alberto y Óscar no han dejado de servir cañas. El nombre de su bar ha calado en la afición. Zapatones. Son muchos los que acuden a verlo cámara en mano. Fotos al mural en sus paredes, a la foto de Luis en la entrada. Ayer también podían hacerlo a una barra aledaña sobre su suelo azul como de cielo. Allí, en Zapatones, estaban como el resto de bares: todo lleno de envoltorios y latas, muchas latas, de cerveza, de refrescos. En un mes son dos bares más recién abiertos, eso que se suman al desembarco del Atlético en el barrio, que están tiñendo todo su aire de rojiblanco. Zapatones y La Previa.
“Es que lo que vamos a vivir es historia, el estreno del campo del Atleti”, continúan contando en El Churretón mientras los carros con bebida se van acumulando en sus pasillos. “Todo el bar parece un almacén”, bromea por su aspecto lleno de envoltorios y latas, muchas latas, de cerveza, refrescos. “Tenemos también 400 kilos de carne, para los bocadillos y la comida”.
Su plan es sencillo: desde las 12:00 las puertas de la cocina serán un continuo salir y entrar. “No sabes cuánta gente ha venido estos días a preguntar a qué hora empezamos con la previa”. A ver el campo, a probar cuánto se tarda si se va en la Línea 7, si se va en la Línea 2, bajándose en Las Rosas y después caminando, a hacerse los primeros selfies. Un poco más allá, en la taberna Volapié, franquicia, también nueva, en Arcentales, ayer por la tarde se estaban instalando dos televisores y tres grifos de cerveza esperaban, listos para instalarse. Las latas ya estaban colocadas, en frigoríficos, enfriando para hoy servirlas.
En sus barras ya sólo se habla del Atleti. Lo hacían allí. Y en El estadio, en las 9 Musas o en El Peñón. Ella también tiene listas sus tapas. Oreja, bravas, tortilla. Y la cerveza, los vasos de plástico. Para su dueña, Zuleyma, no es nuevo, son muchas las previas: fue la primera en mudarse de barrio tras el Atleti. De Ermita del Santo a la calle Suecia. Esa que hace siete meses apenas tenía seis bares y ahora decenas. Todo esperando un día, hoy, cuando se tiren las primeras cañas celebrando que el Atleti ya sí, al fin, está en el barrio.
Aperturas Locales en obras, todo ocupado: en un mes han abierto otros dos bares
UN NOMBRE QUE TRIUNFA
Comida Se servirán bocadillos y tapas en una previa que, esperan, sea muy larga