El Elche quiere una alegría para cerrar un año aciago
Josico busca el primer triunfo ante un Olot en línea ascendente
El Elche despide un año para olvidar en el Martínez Valero. Doce meses que incluyen un descenso a Segunda División B, unos problemas institucionales que mantienen en vilo el futuro de la entidad franjiverde y una fractura social que no ayuda a curar las heridas de una entidad histórica que ya debe estar pidiéndole a 2018 dejar atrás todos sus males para volver a coger impulso con la mirada puesta en el regreso al fútbol profesional.
Josico aún no sabe lo que es ganar con su nuevo equipo después de empatar en los tres partidos de liga que ha dirigido y haber sido eliminado en la Copa frente al Atlético de Madrid, resultado que entra en la lógica. Esta trayectoria, unida a la herencia de Mir y la derrota en la jornada de transición con el tándem Acciari-Óscar Sánchez, acumula seis jornadas sin ganar y representan la peor racha de la historia del club ilicitano en Segunda División B.
El técnico recupera a Manu Sánchez para el pivote defensivo y retrasará a Gonzalo Verdú al centro de la defensa. Collantes, que activó el ataque en la segunda parte del derbi, podría volver para volver a cabalgar por su carril de la derecha para buscar arriba a Benja, con opciones de regresar a la titularidad en casa tras ser suplente en el derbi ante el Hércules hace una semana.
El rival. El Olot es un lobo con piel de cordero. Suma más puntos que el Elche en las últimas jornadas (cuatro empates y la última victoria frente al Lleida) y Raúl Garrido se mantiene invicto desde que llegó al banquillo. Recupera a Héctor Simón para llevar la manija en el centro del campo aunque cuenta con problemas de efectivos en la línea defensiva.