Sant Adrià: “El trabajo en la base ha dado sus frutos”
Es un club de cantera que ha pasado de la tercera división a la Copa
Desde 2014 ha sido campeón de España infantil, cadete y júnior
Sant Adrià de Besòs vivirá hoy un día grande: su equipo de baloncesto, el Snatt’s, se estrenará en la Copa de la Reina. El ascenso de las ‘lilas’ ha sido meteórico. Hace ocho años tuvieron que renunciar a la Liga Femenina 2 por motivos económicos.
Si me hubieran dicho hace ocho años que ahora estaría a punto de jugar la Copa, no me lo hubiera creído”. Lo dice Cristina Hurtado, capitana de un Snatt’s Sant Adrià que se estrena en el torneo del KO en su primer año en la élite. Un equipo centrado en la cantera que tuvo que renunciar hace ocho años a su plaza en Liga Femenina 2 por motivos económicos. Justo cuando llegó Hurtado: “Teníamos el equipo en Primera Nacional, en Copa Cataluña. Cada año hemos ido dando un paso adelante: primero con el ascenso a Liga 2, tres años después al subir a la Liga Dia... y ahora estamos en la Copa”, cuenta la capitana. Sant Adrià de Besòs, una pequeña localidad situada entre Barcelona y Badalona, se ha convertido en una de las canteras más prolíficas del baloncesto español. En los últimos años ha sido campeona de España júnior (2014), cadete (2015 y 2017) e infantil (2015 y 2017). “Lleva trabajando desde la base muchos años y todo esto ha dado sus frutos en el primer equipo. Aquí hay jugadoras que llegaron en mini y están empapadas de la filosofía lila. Eso es lo importante, trabajar desde la base y no perder la cabeza… ni cuando llegas arriba”.
‘Boom’. El baloncesto femenino en Sant Adrià vivió un boom en los 80. Tras unos años a la deriva, en 1992 Eduardo Espelleta, actual vicepresidente, fundó el Club Femeni Sant Adrià. Dos décadas después se ha convertido en todo un referente. “El baloncesto femenino ha ido creciendo no sólo en la ciudad de Sant Adrià, sino un poco en toda Barcelona. Últimamente hay muchas niñas que vienen de fuera. Al final, lo importante es ofrecer un buen proyecto deportivo”. Y ¿cómo lo hace? “Con buenos entrenadores y una base común en todo el club”.
Y así, pasito a pasito o categoría a categoría, hasta llegar a la Copa. “Es un premio a todo el trabajo de la primera vuelta. No nos lo esperábamos, porque nuestro objetivo es, y sigue siendo, la permanencia”. También ha ayudado la llegada de Belén Arrojo, en la lista de Mondelo para la Ventana de febrero. “Fue muy valiente. Está en un club en el que puede crecer y ha encajado muy bien”.
La relación con la cantera no ha cambiado en este tiempo. “Quizá algunas nos puedan ver más inaccesibles, pero no lo somos. Nos juntamos con ellas, hablamos, nos hacemos fotos... Estamos ahí para lo que necesiten. Cuando acabe nuestra temporada, comenzará la suya y allí estaremos”. Un club que es casi una familia.