Un Barça a lo campeón manda con puño de hierro
Villarreal, Valencia y Atleti, aspirantes. El Levante, revelación
Barça ya manda con puño de hierro en LaLiga Promises. A diferencia del año pasado, el actual campeón empezó el torneo como un tiro. Con solidez y solvencia, cerró la fase de grupos de forma perfecta. Fue el único de los 20 equipos que ganó los cuatro partidos y acabó imbatido. El conjunto culé es una roca y muy fiable. No necesita golear para demostrar que es el rival a batir.
Al margen del Barça, LaLiga Promises ya conoce a los 16 mejores equipos del campeonato. Tras el carrusel de partidos de la fase de grupos (se disputaron 40 en la jornada de ayer), el Villarreal y el Valencia presentaron su candidatura y dejaron muy buenas sensaciones. Ambos cedieron sólo un empate y tampoco encajaron ningún gol en los cuatro partidos.
Entre los favoritos, se descolgó el Madrid en el último partido de la jornada. El conjunto blanco fue goleado por el Levante ( 3- 0) y acabó tercero, por detrás del propio Levante y Las Palmas. Los tres terminaron con nueve puntos. Precisamente, el conjunto granota fue la gran revelación de la fase de grupos. Demostró tener una pegada descomunal y acabó como el máximo realizador de los 20 participantes. Anotó once dianas en cuatro partidos. Sus números son para tener en cuenta.
La otra cara de la moneda la protagonizaron la Real Sociedad, Getafe, Eibar y Leganés. Los cuatro quedaron eliminados y perdieron sus cuatro partidos. El Lega se marchó sin ver puerta.
La hora de la verdad empieza esta mañana con los octavos de final. Atlético-Sevilla, Valencia- Celta, Barça- Alavés, Málaga- Madrid y Villarreal- Athletic son algunos de los emparejamientos más atractivos. Los cuartos se jugarán esta tarde y las semis y la gran final, el domingo.
A título individual, fueron muchos los jugadores que brillaron. Pablo Serón, Sami, Dani, Ibrahima y Bryan, entre otros, demostraron su clase y dejaron destellos en Vila-real. Hoy toca seguir disfrutando en la Ciudad Deportiva Pamesa Cerámica.
Grupos El Madrid terminó tercero y dejó dudas en el último partido