Los herederos de Usain Bolt

Había cierto temor al Año I después de Usain Bolt. El atletismo perdía a su referente, en marcas y en carisma. ¿Quién podría tapar ese agujero? Que el último campeón mundial de 100 metros fuera Justin Gatlin, un treintañero con currículo de dopado, tampoco empujaba al optimismo. Pero hay motivos para recuperar la esperanza. Varios. El día antes, Santiago Segurola nos presentaba a diez emergentes atletas en los alrededores de los 20 años, que asombran en la vigente temporada. Seis de ellos compitieron ayer: uno en Guadalajara y cinco en la Diamond League de Lausana. Y tres en la misma carrera: los 200 metros de la Athletissima. Ganó Noah Lyles con 19.69, con lo que iguala su propio mejor registro del año. A su edad, Bolt no corría tan rápido. Tampoco en los 100, donde acredita 9.88. Lyles, por cierto, celebra sus triunfos con un bailecito que bien podría haber protagonizado el jamaicano. Batió a Michael Norman, que paró el crono en 19.88. Junto a ellos destacan otros velocistas como Christian Coleman, Rai Benjamin, Clarence Munyai y el vallista Abderraman Samba. Hay porvenir en el sprint. Y también en otras especialidades, como en la longitud con Juan Miguel Echeverría, que casi se salió del foso de Estocolmo. La nueva generación crece igualmente dentro de nuestras fronteras. María Vicente, oro mundial juvenil, se proclamará hoy campeona de Europa de heptatlón. A esta atleta pertenecen nueve de los 155 récords nacionales que se han batido este año en España, 111 de ellos (48 al aire libre y 63 bajo techo) en categorías de menores de 23 años. El futuro ya está aquí.

“LYLES, POR CIERTO, CELEBRA SUS TRIUNFOS CON UN BAILECITO QUE BIEN PODRÍA HABER...”