El tándem Modric-Rakitic
Son el alma de Croacia: 91 pases entre ellos Henderson, al quite
El fútbol de Croacia se traslada a las figuras de Modric y Rakitic. Su papel es siempre decisivo en las posibilidades de los de Dalic. El madridista ha participado en cuatro goles. Inglaterra recurrirá a Henderson (18 acciones de recuperación por partido) como freno. Kane será su baza ofensiva.
Aliados. No se puede desmembrar el mérito de Croacia en este Mundial del talento de Modric y Rakitic. En un equipo atractivo, con gusto, ambos concentran todo el fútbol. Forman un tándem perfecto y afilan el sentido croata desde los primeros pases (91 combinaciones entre ambos). Como interiores, bien resguardados por Brozovic que actúa de mediocentro posicional (seis interceptaciones), arman la salida desde atrás y orientan los ataques en los últimos metros. Croacia se identifica en ellos.
Agitador. Preocupan en Inglaterra las progresiones de Modric. Ha participado directamente en cuatro goles y nadie tiene su capacidad en la distribución ofensiva. Su cifra de balones al área, siete por partido, representa esta cualidad. Respecto a su rol en el Madrid, su trascendencia se amplía. Modric promedia 65 pases, dos disparos y dos regates en el Mundial. En el club blanco no alcanza esos números: 59 entregas, un remate y un quiebro.
Atacar como arma. Vigente su sistema defensivo durante todo el torneo, los de
Southgate procurarán arrancarse la presión de Croacia y apurarla por los costados con las llegadas de Trippier y
Young. Lanzadores en la estrategia, envían 11 y seis centros al área, respectivamente.
Kane vertebra casi todos los movimientos finales. La estadística le encumbra: seis goles, diez disparos por choque y vencedor en el 43% de sus duelos ofensivos.