Dos puntos y sin Guedes de bombero
El Valencia ha empezado la temporada fallando en las áreas. En la suya se ha mostrado débil y en la del rival, dócil. Tampoco Parejo está preciso de principio a fin de los partidos ni Kondogbia fue contundente en Cornellà.
El resultado de todo ello es que el equipo lleva sumados dos puntos de nueve, que tampoco es como para quemar la falla, porque solo son dos menos que el Atleti
y uno más que el Villarreal,
por mentar a dos teóricos rivales por Europa, si bien son siete puntos que en esta Liga ya no sumarán. Marcelino es consciente que llegar a 40 puntos como hiciera hace un año en la primera vuelta no es algo que se vaya a repetir todos los eneros, si bien, o a su vez, sabe que la cifra no puede estar muy lejana para repetir presencia en Champions, que es el fin, mandamiento y necesidad.
Esos siete puntos que se escaparon han avivado debates. El fichaje de Guedes eclipsó, como era lógico, la derrota en Cornellà; pero los goles encajados en Orriols
pusieron el foco crítico en el entramado defensivo y ésta vez no hubo bombero luso al rescate sino mecha en forma de parón de selecciones. Y dos dianas. Piccini es un fichaje que sorprende desde el primer día, no por su valía (del italiano depende demostrarla) sino por su perfil (más ofensivo de lo que parecía que se iba a fichar); y la lesión de Garay y los cuidados a Murillo han dado un protagonismo a Diakhaby para el que quizás no estaba aún preparado. Pero hay equipo, plantilla y entrenador.