Nervios, protestas y tarjetas amarillas
Al Barça no le acaban de salir las cosas en LaLiga. Pese a que en los primeros cuatro partidos sumó 12 puntos, en los cuatro siguientes fue incapaz de poder conseguir un triunfo. Tres empates (Girona y Athletic como locales y Valencia como visitante) y una derrota (en Butarque) han generado dudas al conjunto culé.
En ocho partidos de Liga, el Barça ha visto 13 amarillas y una roja, la del codazo de Clement Lenglet a Pere Pons (el medio del Girona se disculpó al creer que la falta había sido suya). De estas 13 amonestaciones, seis fueron por protestar a los colegiados y de esas seis, tres fueron para capitanes del equipo: Lionel Messi y Sergio Busquets la vieron ante el Athletic (1-1 en el Camp Nou) y Gerard Piqué la noche que el Girona arrancó un punto del estadio azulgrana. Samuel Umtiti en Anoeta (1-2), Ivan Rakitic (ante el Athletic) y Luis Suárez, el pasado domingo en Mestalla, son los otros futbolistas azulgrana que acabaron desconsiderando al colegiado, lo que les costó una tarjeta amarilla por protestar. Ernesto Valverde considera que su equipo sigue tratando con el máximo respeto a los colegiados. Hace unas semanas, el entrenador del Barcelona consideró que “no creo que mis jugadores estén protestando más de lo que toca, no tengo esa impresión”.