Dos golazos de Neyder y Borja acaban con el líder
El Elche tumba al Málaga tras firmar un partido completo
El Málaga ya sabe lo que es tropezar dos veces en la misma piedra. Hace once años también llegaba al Martínez Valero vestido de líder, tras siete victorias consecutivas, con Muñiz en el banquillo y paso firme hacia Primera. Hizo parada en Elche y aquella racha saltó por los aires. En esta ocasión no era David Vidal el del banquillo franjiverde, sino Pacheta. El burgalés había tomado nota y adelantó en la previa que su equipo repetiría la hazaña. Y así fue, con dos golazos, uno de Neyder y otro de Borja, que tumbaron a los andaluces cuyo liderato queda esta jornada al alcance del Granada.
El líder estuvo irreconocible durante el primer acto. Solo se mostró en los minutos iniciales, en los que el Elche tuvo que correr detrás de la pelota hasta que la cogió y se apropió de ella. Francis relevó al cuestionado José Juan en la portería. Su primera intervención fue una salida en falso que Leschuk no aprovechó y cabeceó alto. Luego le ganó un mano a mano al delantero argentino, en el 26’, para hacerse con la confianza de la grada. Antes, Sory la tuvo de tacón, pero su remate a pase de Gonzalo Villar se fue ligeramente cruzado.
El Elche empezó a creérselo y metió al Málaga en su campo. La afición le empujó hasta el área. A la media hora, Muñiz ya había mandado a calentar a dos jugadores de su banquillo. No le gustaba lo que veía. En el 35’, un centro desde la izquierda de Borja Martínez lo cabeceó imponente Neyder a la red, haciendo inútil la mano de Munir y rompiendo el cerrojo.
Muñiz intentó despertar a los suyos en el vestuario en la noche de Elche. Los visitantes botaron tres córners en los tres primeros minutos. Parecía otro Málaga, más cercano al líder. Pero nada cambió. El Elche supo defender en las trincheras y Francis hizo el resto, con varias paradas de mérito, una de ellas a Leschuk a bocajarro. Impresionante. Borja Martínez sentenció el triunfo con un misil ante el que nada pudo hacer Munir. La entrada de Hicham y Pacheco no sirvió de nada. El Elche ya tenía el botín.
Desdibujado El conjunto de Muñiz estuvo irreconocible