El Valladolid toma aire con los regalos de la Real
El equipo de Sergio resurgió tras un mes complicado
EI Valladolid cogió aire en Anoeta a costa de una Real Sociedad que vio frenada su progresión de las últimas semanas. Porque concedió dos goles en dos errores defensivos evitables y luego, a pesar de que trabajó y apretó hasta el final, no le dio para conseguir empatar. El cuadro pucelano volvió a sus orígenes a domicilio, con un plan bien definido, defender fuerte y salir rápido al ataque, que sus jugadores interpretaron a la perfección. Aprovechó los regalos de la Real y se defendió con orden en la recta final. Sufrió, es cierto, porque los txuri-urdin estaban obligados a apretar, pero lo hicieron con más corazón que cabeza, y apenas crearon peligro de verdad para empatar.
De esta manera, los realistas pierden otra vez una buena oportunidad de meterse de lleno en la pelea por Europa. Y el Valladolid consigue romper su mala racha de cinco jornadas seguidas sin ganar y cortar de raíz su caída en la tabla.
El planteamiento de Sergio de inicio fue casi perfecto. Porque jugó a un nivel muy alto de intensidad y fue capaz de cortar todas las líneas de pase de la Real, haciéndole sentir muy incómodo en todo momento. Tal era su nivel de solidaridad defensiva que provocaba errores no forzados en el centro del campo de la Real. En una de esas buenas presiones, Illarra perdió un balón en la zona de influencia del ataque del Valladolid y Toni Villa no se lo pensó, fusilando a Moyá. Más adelante, una salida a por uvas del portero local regaló el segundo tanto pucelano. Oyarzabal recortó con media hora por jugar, pero no hubo empate.