Toca acertar con el nuevo delantero
El dato es estremecedor. El Valencia marcó 36 goles en los primeros cuatro meses de Marcelino, los últimos de 2017. En todo 2018 ha marcado 44, sólo ocho más Con ese déficit, aún le dio para llegar a las semifinales de Copa, acabar cuarto en Liga para meterse en la
Champions, quedarse afuera de los octavos por un gol ilegal de Fellaini, terminar 2018 a cuatro puntos de Europa y estar en disposición de todo en Europa League y Copa del
Rey en esta temporada. Pocos goles pero bien rentabilizados. No obstante, marcando tan poco lo lógico es estar al filo de la navaja por muy bien que se administren. Por eso, para 2019, el valencianismo pide más goles, más puntería, más polvora... como quiera que se pueda llamar. Pero para eso hay que cambiar cosas. Porque
Batshuayi parece que se marchará, Gameiro no va, Rodrigo este año la puerta se le ha hecho pequeña y Santi Mina llega hasta donde llega.
Así que no queda otra que colocar a Batshuayi y acertar con el recambio. No te va a llegar un delantero que te marque 15 goles en media temporada pero Longoria, en el scouting, y Alemany, en la negociación, deben dar con el hombre que te marque unos cuantos goles y abra la lata para que el resto de los delanteros (y medios) comiencen a golear. Ocasiones hay, según
Marcelino, fortaleza defensiva, también, al menos los números así lo indican. Faltan los goles que cuando lleguen, si es que llegan, traerán todo lo demás (confianza, seguridad, autoestima...). Con sólo 44 han dado para bastante en 2018, así que si se da por mejorar aún no hay nada perdido.