Maverick lidera pero a Yamaha le falta punta
Viñales dominó la combinada, pero deben trabajar la electrónica para recortar la desventaja con Honda y Ducati. Los japoneses han mejorado desde 2018 y la moto italiana sigue siendo la más equilibrada
No es oro todo lo que reluce en Yamaha.
A pesar del mejor crono de Maverick en el test de Qatar y el quinto de Rossi en la combinada de los tres días, no es oro todo lo que reluce en el box oficial de Yamaha. Allí se quejan de que les falta velocidad punta, algo que se debe en gran medida a falta de aceleración, lo que llega también por falta de agarre. Es decir, que han de seguir trabajando en la electrónica para recortar la desventaja con Honda y Ducati, con las que Rossi decía que perdían 10 km/h, pero también da la sensación de que la Suzuki les ha superado.
La Honda va bien.
La Honda de este año nace con menos problemas aún que la versión de 2018, que ya mejoraba a la de 2017. El nuevo motor va y se han esforzado en el test por mejorar el apartado de la aerodinámica, con otro nuevo carenado alado y un nuevo colín. En realidad, la mayor preocupación con vistas al estreno mundialista está más en el estado físico de sus pilotos que en el nivel de su RC213V, y en eso también hay buenas noticias, porque Márquez empieza a sentirse bien encima de la moto y Lorenzo, por su parte, ha ido de menos a más. Trabajó mucho el plano ergonómico para mejorar la posición.
Ducati se ha guardado cartas.
Pocas mejoras respecto al año pasado, porque hay poco que mejorar en la moto más equilibrada de la parrilla. Eso sí, siguen un claro paso por delante de sus rivales a nivel de aerodinámica y ahora le hace comerse el tarro a la competencia con un carenado con triple ala, las dos de siempre más una más baja en cada lateral. Dovizioso (15º) no se ha ob- sesionado en busca de la vuelta rápida y Petrucci (10º) ha demostrado buen ritmo.
La Suzuki sigue creciendo.
No les ha hecho falta hacer grandes cambios para mejorar bastante. Da la sensación de que la GSX-RR está ya por delante de la Yamaha. Pierde aún un poco de punta con respecto a Ducati y Honda. Además, Rins ha confirmado todas las buenas sensaciones que ya sintió en Sepang y Mir desprende soltura. La mayor mejora técnica está en la estabilidad en la frenada.
Pol se come a Zarco en KTM.
En KTM siguen mejorando todo poco a poco, el motor, la electrónica, la aerodinámica, el chasis y el basculante, pero es que los demás también lo hacen. Se- guramente que lo han hecho en mayor medida proporcionalmente comparado con las principales fábricas rivales, pero también es cierto que partían más lejos y les sigue costando acercarse a la cabeza. En Losail, Pol le ha metido un buen repaso a Zarco: 8º a 0.562 de la cabeza contra 19º a 1.508.
Aprilia se esfuerza sin grandes resultados.
Aprilia se esfuerza por mejorar su RS-GP, pero se les ve aún confundidos a pocos días de la primera cita de la temporada. Descartaron por completo la versión de 2018, que resultó un fiasco, sobre todo en términos de motor, y se inspiran más en el modelo de 2017 para las novedades de la unidad de 2019. Al box ha llegado Iannone para acompañar a Aleix y por el momento no da muestras de poder acabar delante del español.
Los satélites siempre cuentan en MotoGP.
En Malasia fue Bagnaia el que terminó segundo y ahora ha sido Quartararo el que ha sorprendido con otro gran segundo al manillar de su Yamaha satélite. En Honda, Crutchlow y Nakagami tienen material oficial. Las Ducati satélites fueron más rápidas en Malasia. Y de las KTM de Oliveira y Syahrin, poco se puede esperar por ahora.