La Superliga europea aspira a dar 900M€ anuales a cada club participante a cambio de ocupar los fines de semana

Para Roures, presidente de Mediapro, “no hay tanto dinero para dar a los equipos y me parece una ocurrencia imposible de cumplir” “Ceferin entró en pánico cuando le plantearon el torneo y se alió con los clubes para que no excluyeran a la UEFA”, dicen la

El programa ‘El Partidazo’, que se emite cada noche en la COPE, informó que la Superliga que proyectan la Asociación Europea de Clubes (ECA) y la UEFA aspira a pagar 900 millones a cada equipo como fijo por participar. A esta cantidad habría que sumar los premios por victorias y el reparto de los derechos de televisión.

Las magnitudes económicas del nuevo formato, que pasa por jugar la Superliga en fin de semana y enviar los campeonatos nacionales a los miércoles, revientan los números de la Champions. “Es imposible pagar un fijo de 900 millones por equipo porque no hay dinero para eso. Me parece alucinante que se le dé pábulo a esta ocurrencia. Sólo sería imaginable si se suprimen las ligas nacionales y todos los recursos se emplean en la Superliga. Y aún así..., no lo veo posible”, dijo a este periódico el presidente de Mediapro, Jaume Roures, un experto mundialmente reconocido en el mercado de los derechos de televisión.

Ganancias Al fijo de 900 habría que sumar los premios y la cuota de televisión

Ante este panorama, las Ligas europeas, agrupadas en la European Professional Football Leagues (EPFL), ya tomaron la decisión de romper con la organización presidida por Ceferin y revocaron el memorándum de entendimiento que habían firmado con la UEFA. “Creen que Ceferin se ha doblegado ante Agnelli porque entró en pánico ante la idea de que los grandes clubes europeos organizaran una Champions por su cuenta”, afirman desde la EPFL. La idea-base de la Superliga sobre la que se proyectaría la nueva Champions fue revelada por Der Spiegel, que dio todo lujo de detalles según los documentos aportados por Football Leaks.

Los elegidos. Los documentos revelan que 16 de los grandes clubes de Europa están detrás del plan: Real Madrid, Barcelona, Manchester United, Bayern Múnich, Juventus, Chelsea, Arsenal, PSG, City, Liverpool y Milán, que figuran como fundadores, además de Atlético, Dortmund, Marsella, Inter y Roma, que están como invitados. La Superliga Europea tendría dos fases: primero, grupos; luego, eliminatorias. Asimismo, podría organizarse una segunda división, dando así posibilidades a los equipos que la integren a ascender.

“Lo que no se entiende es que este reducido y exclusivo grupo de clubes, que nació con el germen del G-8, haya terminado formando una organización de 232 equipos, la ECA, que defiende una Superliga

cerrada en el que más de doscientos de los que les hacen el caldo gordo van a ser desplazados a los miércoles”, dicen en la EPFL. En España, además de Madrid, Atlético y Barça (que jugarían la Superliga), son miembros de la ECA el Athletic, Sevilla, Valencia, Villarreal, Real Sociedad y Málaga, que no podrían acceder al torneo.

Pero el plan Superliga está avanzado. Tanto que trata de asociarse con un potente socio en

EE UU. Se trata de ‘Relevent Sport’, que sorprendentemente es la empresa que negoció con Javier Tebas para organizar en Miami el Girona-Barça. La presencia de los grandes clubes en la Champions Club que organiza cada verano en Estados Unidos dio la posibilidad a su consejero, Charles Stillitano, de tantear a los grandes clubes. “Hubo un entendimiento inmediato, porque tanto Stillitano como los grandes clubes europeos sólo tienen una religión: el dinero”, dijo un colaborador de Platini antes de que fuera repudiado por la UEFA.

Una vez que Stillitano comprobó que los principales equipos estaban por la labor, y con el respaldo de su jefe, el multimillonario Stephen Ross, dueño de los Miami Dolphins, encargó un informe al despacho inglés ‘Steen y Hamilton’ que, según Football Leaks, dio viabilidad al proyecto. Luego, los grandes clubes, singularmente el Madrid, la Juve y el Bayern, presentaron un plan de acción llamado A Super League Scenario for Top European Football en el que detallaban el plan. Cuando el documento llegó a Ceferin, el presidente de la UEFA se alió con los clubes.

El año 2024 (como muy tarde) es la fecha marcada en rojo por el presidente de la ECA, Andrea Agnelli, para arrancar con la Superliga. De momento ha metido a Al Khelaifi como representante de la ECA en la UEFA. Tebas pidió a la UEFA que rechazara al presidente del PSG. Pero fue en vano.

Ceferin frenó la voracidad pecuniaria de los clubes con mayores premios en la Champion. Pero ya les parece poco. “Al presidente de la UEFA se le han acabado los recursos, y por eso ahora es el mejor amigo de Agnelli”, dicen en las ligas. El martes, Agnelli ha convocado a la ECA en Ámsterdam para darle otro impulso a su plan. “Lo triste sería que los clubes que no están en la súper élite apoyaran este dislate”, dicen en la EPFL.

EE UU Relevent, la empresa del Girona-Barça, ha mostrado interés