Agresión en Atenas a los árbitros del partido del Barça
Lamonica tuvo que ser ingresado
El encuentro de la 25ª jornada de la Euroliga entre el Panathinaikos y el Barcelona no terminó bien. No dentro de la propia cancha, un partido muy igualado en el que se protestaron con vehemencia algunas acciones en contra de los locales (que terminaron perdiendo), sino fuera de ella.
La prensa griega informó ayer de un desgraciado incidente que tuvo lugar ya fuera del Olympic Indoor Hall (conocido popularmente como OAKA), pabellón en el que el Panathinaikos disputa sus partidos como local. Varios individuos, que todavía no han sido identificados, atacaron el taxi que pretendía llevar a los tres árbitros del partido (Luigi Lamonica, Damir Javor y Emin Mogulkoc) a su hotel. El episodio no tuvo lugar junto a la cancha, sino a unos cinco kilómetros de distancia. Los colegiados, que iban acompañados de Nikos Pitsilkas, otro oficial de la Euroliga, fueron atacados por estos individuos, que circulaban en motocicleta y se dieron a la fuga justo después de los hechos. El veterano Lamonica fue el que se llevó la peor parte, ya que la rotura de uno de los cristales del automóvil le tocó de cerca y tuvo que ser hospitalizado de inmediato, Sin embargo, después de pasar la noche ingresado quiso enviar un mensaje tranquilizador a través de un comunicado: “Estoy bien, idiotas hay en todas partes. Tengo lesiones en la barbilla y en una mano pero estoy bien, podré arbitrar el próximo partido”, aseguró el italiano.
El Panathinaikos emitió ayer, por su parte, otro comunicado en el que repudiaba los hechos: “Condenamos enérgicamente cualquier forma de violencia y reforzaremos nuestros esfuerzos para combatirla”. Y la asociación de jugadores de la Euroliga, también mostró su disgusto: “No hay lugar para estas situaciones en el deporte”.