■ Balonmano. EHF
El Cuenca sumó su primera derrota ante el Rhein Neckar alemán al caer en casa 28-33. El equipo alemán de Gedeón Guardiola comanda el grupo.
EI Rumanía-España del sábado dejó resaca en ambos equipos. Tras el partido, que ganaron los locales (24-7), ambas selecciones coincidieron en una discoteca de Botosani, sede del encuentro, y se enzarzaron en una pelea que terminó con la intervención de la policía local, según adelantó el medio rumano Monitorul.
Fuentes de la Federación Española de Rugby confirmaron a AS el suceso. Según la versión federativa, el incidente se desató a raíz de un comentario jocoso y el primer golpe lo lanzó el tercera línea y capitán de los Robles, Mihai Macovei.
“No hubo personas que necesitaran atención médica y los involucrados no presentaron quejas penales”, declaró Delia Neniscu, portavoz de la policía local. Por tanto, el incidente no tendrá más recorrido.
De fondo, las rencillas entre ambos equipos tras el clasificatorio mundialista de 2018. Entonces España perdió el partido decisivo en Bélgica con un polémico arbitraje del rumano
Vlad Iordachescu. La derrota de los Leones clasificaba a Rumanía, pero un cruce de denuncias posterior por jugadores nacionalizados terminó con las dos selecciones descalificadas y Rusia disputando el Mundial.
Las alarmas han vuelto a saltar con John Wesell Bell, sudafricano nacionalizado por España que se cayó a última hora de la alineación para el partido. La FER adujo “precaución”, pero Revista 22 publicó ayer que Rumanía pidió revisar su situación y que el del VRAC incumple la normativa. Esta dice que debería haber residido en el país al menos diez meses durante tres años seguidos para ser elegible. Y según su pasaporte, en uno de los años computados se ausentó 68 días. Bell ha jugado tres partidos con la Selección, dos de ellos en este Seis Naciones B.
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