“No sabemos la solución al problema de la Honda”
Alberto Puig, team manager del HRC, fue claro en ‘gpone.com’ ante la peliaguda situación de Honda a una semana del inicio del Mundial: “No conocemos la solución a los problemas de Honda. Estamos probando cosas del año pasado, pero también de hace dos o tres años. La moto de 2020 es más rápida, lo hemos corroborado con nuestros datos, pero a veces eso no basta. Se trata de encontrar la combinación adecuada entre los elementos aunque no hay mucho tiempo antes de la primera carrera”.
Puig tampoco esquivó el tema de ver a Marc Márquez con la moto del pasado año:
“Estamos probando muchas cosas y es verdad que estamos trabajando sobre la moto de 2019, pero no sé si será la solución. Igual corremos con la de este año o con la del pasado. Quizá usamos la que teníamos pensada en 2021. Esto lo sabe Honda, no yo”, dice el catalán. Y también habló del estado de salud del campeón: “Marc no estará al máximo en el GP de Qatar, pero el Mundial empieza aquí, no acaba. Su condición física es un problema, no está bien físicamente y le gustaría estarlo, pero ya lo sabíamos”.
Ferrari quiere que su SF1000 permita una configuración flexible. Unos reglajes que puedan satisfacer por igual a Vettel y a Leclerc, que son dos pilotos con requerimientos muy diferentes en el asfalto. El alemán quiere un coche fijado al suelo, al monegasco no le molesta cierto sobreviraje y un tren trasero algo más suelto, y por ahí han ido algunas de las decisiones de la
Scuderia durante el invierno. Los dos pilotos confirman esta flexibilidad en el
set-up, que es una de las particularidades del coche que los italianos están testando hasta el extremo en Barcelona.
“Queremos confirmar la correlación en muchas condiciones, entender lo que pueda ir mal y corregir los problemas. No ha habido problemas, pero queremos entender bien nuestro paquete”, explica Binotto, jefe del equipo. Y es que, aunque hayan transmitido inferioridad, el programa de pruebas de Ferrari se ha seguido al dedillo sin buscar vueltas rápidas, “sin optimizar los reglajes y sin buscar prestaciones”, algo que harán durante la segunda semana. Si bien es cierto que no habrá grandes alardes tecnológicos en forma de piezas nuevas, el coche rojo aún tiene mucho que mostrar.
Vettel, sobre el plan de trabajo: “En pocas vueltas se sienten las características del coche, aunque en algunos puntos sea similar al del año pasado. Sigue siendo pronto, pero parece más rápido. Tenemos
un plan con varios puntos que queremos corroborar. Ahora depende de nosotros explorar el coche entero y ver cómo responde en la pista”. El tetracampeón alemán, de 32 años, sigue siendo la referencia en la pista: no en vano, él debía estrenar el coche en Barcelona y cerrar el programa el próximo viernes, aunque la gripe le impidió cumplir con el primer cometido.
El otro reto de Maranello, aparte de encontrar rendimiento y mejorar el 2019 (con nueve poles, pero sólo tres victorias y muy lejos de Mercedes), es encajar las ambiciones de Leclerc (22 años) y Seb. Ya no habrá pilotos prioritarios, aunque sí objetivos comunes para la escudería. Binotto lo confirma: “El año pasado fue útil para que conociéramos nuestros roles y nuestras prioridades.
Vettel “Depende de nosotros explorar el coche y ver cómo responde”
Binotto “Los dos pilotos entienden cómo deben comportarse en el coche”
Los dos pilotos se conocen mejor ahora y estoy muy contento por cómo han ido las discusiones y contribuciones al coche y al equipo. No hay mucho más que decirles porque entienden perfectamente cómo se deben comportar en el coche”.
En resumen, no habrá otro accidente como el de Brasil porque no puede haberlo. Aunque las órdenes de equipo tampoco van a desaparecer de golpe. “Charles ha demostrado que está preparado, hizo una fantástica temporada 2019 y alcanzó el nivel de ‘Seb’. Por eso empiezan la temporada al mismo nivel, pero la primera prioridad es siempre el equipo. Seguirá habiendo órdenes para beneficiar a la escudería”, traslada el ingeniero suizo. Ferrari afronta curvas en todos los frentes.