Fabio Capello

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¿Dónde pasa estos días tan difíciles?

—-Donde vivo desde hace muchos años, en Lugano, al norte de Italia, en Suiza.

—¿Cómo está el tema ahí?

—Igual que en Italia. La gente no sale de casa, se ve muy poca gente en la calle.

—¿Pero hay obligación de confinamiento?

—Todavía no, pero la gente lo respeta.

—¿Y usted, cómo está?

—Bien, tranquilo, con mi mujer… Afortunadamente no ha habido ninguna mala noticia en la familia. Mis hijos están bien. Sin ver fútbol, eso sí, algo extraño.

—No estamos acostumbrados.

—(Risas). El día es muy largo, muy largo... Esto se va a complicar mucho en todo el mundo. Es una catástrofe. En Lombardía, en Bérgamo y Brescia, pegó muy fuerte. Y es un sitio en el que se concentran casi diez millones de personas. Mucha gente. Es un problema.

—La Eurocopa se pasó a 2021. ¿Una buena idea?

—Muy buena idea. No se sabe cuando acabará todo esto. Hay que poner todo el próximo año, todo, todo…

—¿Y las ligas nacionales?

—No se puede decir si se jugarán. Vamos a ver. Lo que no se puede hacer es jugar al fútbol con las imágenes de los muertos desfilando por la calle que estamos teniendo aquí. Y en España mire el Valencia, el Espanyol, el Alavés… Todos contagiados. No va a ser fácil. Yo empecé a jugar a finales de los 50, ya después de la Guerra, y no he vivido nada parecido.

—¿Cómo gestiona un entrenador un parón de este tipo?

—Imposible. Sólo puedes esperar que tus jugadores sean profesionales, que se cuiden, que no engorden… Si siguen comiendo como cuando están entrenando, despídete.

—Claro.

—Aunque bueno, ahora no hay una estrella que no entrene con un preparador personal.

—¿Estaba viendo la Liga?

—Siempre sigo los equipos españoles. Fue una sorpresa ver al Atlético ganar al Liverpool. Simeone planteó un gran partido. No se le puede reprochar nada. Me gustó tanto su idea de juego, sólo podía hacer lo que hizo. Porque él tiene el mejor portero, Oblak.

—¿Y el Real Madrid?

—Pues no sabría decir, por momentos tiene problemas, por momentos juega muy bien.

—¿Por qué esa irregularidad?

—Necesitas líderes en el campo. El equipo debe tener un referente, alguien a quien seguir que transmita las ganas de vencer. Yo tenía a Raúl, a Hierro, a Redondo… Siempre tenían ganas.

—Y ahora no está Cristiano.

—Eso es… Yo siempre, como comentarista de la televisión, decía: “Si quieres ganarle al Madrid le tienes que hacer mínimo dos goles”. Porque sabías que Cristiano metía uno seguro. Y lo mismo con el Barça y Messi, ¡eh!

—¿Necesita el Madrid una renovación?

—Hay que hacerla, pero con cuidado. Hay que fichar jugadores que marquen la diferencia. Porque cuando te pones la camiseta del Madrid o del Barça es una camiseta que pesa. Y si no tienes mucha calidad, no puedes hacerlo, te pierdes.

—Entiendo…

—Lo mismo pasaba en mi época en el Milán, cuando tocaba jugar en San Siro. Había jugadores que pensaba que eran buenos y… se perdían.

—Rodrygo, Brahim, Vinicius, Odegaard… Es la nueva política del Madrid.

—Esperando que exploten. En mi segunda etapa en el Madrid nos ficharon a Marcelo, Gago e Higuaín. En diciembre me vino el presidente: “¿Por qué no los pones, Fabio?”. “Porque son chavales”, le dije, “hay que esperar un poco. Son el futuro, pueden hacer historia luego”. Y después el único que hizo poco fue Gago, los otros dos hicieron su parte. Necesitaban experiencia y personalidad.

—¿Entonces?

—Hay que fichar jóvenes e ir poco a poco con ellos, cuidarlos. No puedes darle ahora la responsabilidad.

—Ya lo dijo Ramos antes del City: “Es un partido para hombres, los niños, a un lado”. ¿Cómo está la eliminatoria?

—Para mí cambia todo ahora. Con este parón no hay favorito. No sabemos, si se juega, y cómo se pueden encontrar los equipos. Ya no hay favoritos, no se sabe…

—¿Le sorprendió que volviera Zidane al banquillo del Real Madrid?

—Siempre hay que tomar riesgos, ahí se ve a los hombres… Le deseo toda la suerte.

Estrategia “En el Madrid no puedes hacer responsable de todo a los jóvenes”

Zidane “Tomó un riesgo volviendo, ahí es donde se ve a los hombres”