Un partido de Primera
Jonathas regresa y reta a Stuani en Montilivi
Serrat recita: “Hoy puede ser un gran día, plantéatelo así. Aprovecharlo o que pase de largo depende en parte de ti”. Y hoy lo será seguro para Girona o Elche. Ambos dependen de sí mismos. La victoria vale oro y evita hacer números. Porque el 0-0 (tras la prórroga) le daría el ascenso al Girona por su mejor clasificación en LaLiga, pero con cualquier empate a goles, el éxito sería para el Elche.
Es una noche para no arrugarse. Y arriesgar, porque el trabajo de toda la temporada se decide en Montilivi. No hay más: de Girona al cielo. Los ilicitanos buscan volver a sentir la Primera, algo que no saborean desde el descenso la temporada 2014-15. Lo suyo ha sido una travesía por el desierto
(con descenso a Segunda B incluido en la 2016-17). En cuanto a los gerundenses, esperan que este curso haya sido tan sólo un espejismo y volver a la categoría que perdieron hace sólo un año. Para ello se confió en
Francisco (cuarto entrenador este año) y están donde querían: en casa y a un partido de Primera. El técnico del equipo gerundense tiene claro que si algo funciona bien no hay que tocarlo y su 4-2-31 espera dar una última alegría. Recupera, salvo pésimas sensaciones de última hora, a los lesionados Mojica y Aday. Y si hay un partido en el que arriesgar y forzar, es este. Los alineará de inicio. Por ello, Maffeo volverá al lateral derecho.
La afición rojiblanca se conoce de memoria la alineación. Arriba formará, como no, el tridente: Samu, Borja y Stuani. Sobre el césped de Montilivi buscarán crear lo que les fue imposible en el Martínez Valero y guiar a su equipo hacia Primera.
Eso sí, cautela. El Elche no llega de comparsa. Está en una situación inmejorable porque por cada gol obligaría a hacer dos al Girona para arrebatarle el sueño. Y Pacheta recupera a Jonathas. Formará arriba con el incombustible Nino. En defensa, Pacheta deja en el aire si mantendrá el plan anti Stuani o sale con el clásico 4-4-2.
Opciones El triunfo sirve a los dos equipos; el empate sin goles, al Girona