“Me llevo el cariño de una ciudad, eso no tiene precio”
Pacheta
José Roja Martín, Pacheta (Salas de los Infantes, 1968), disfruta de unos días de descanso después de haber ascendido al Elche y no renovar su contrato. Desde Soria, el técnico hace balance a la espera de nuevas ofertas. Su sueño, entrenar en Primera.
—¿Cómo lleva las vacaciones tras lo sucedido? —Bien, descansando, bajando revoluciones y aprovechando el tiempo con la familia y con los amigos. Llevaba casi cinco años sin parar.
—Ya en frío, ¿cómo asimila dejar el Elche?
—Con naturalidad. Como dije en mi despedida: yo me voy, pero mi corazón se queda en Elche.
—¿Qué siente?
—Siento al Elche como algo mío y desde la distancia siempre le desearé lo mejor al club y a su afición. —¿Hubo desencuentro con Bragarnik?
—Ninguno. La propiedad toma sus decisiones porque se juega su patrimonio. —¿Ha perdido o ha ganado años de vida en el Elche? —Años no sé, pero me llevo el cariño de una ciudad y su afición. Eso no tiene precio. —¿Ha sido Pacheta el gran damnificado de acabar tan tarde el playoff?
—Es probable, pero yo ya sabía que esto podía suceder. Han pasado ofertas por delante, pero los tiempos no eran los mismos para todos.
Siempre aposté por finalizar la temporada. Y se acabó de manera magnífica.
—¿Hay algo de lo que se arrepienta?
—Claro que ha habido situaciones duras que te han quitado el sueño, pero todo ha valido la pena; ahora ya no es momento de hablar de ello. —¿Se sintió cuestionado? —Nunca lo sentí. Y si eso sucedió en algún momento, yo no me enteré.
—¿Dónde entrenará en el futuro a corto o medio plazo? —No tengo ni idea. Quiero descansar, ver fútbol y esperar. Cuando vuelva a entrenar, lo valoraré todo para intentar no fallar en mi elección. —¿Con qué sueña Pacheta? —Con que mi familia y mis seres queridos estén bien de salud. En lo profesional, sueño con entrenar en Primera.