El virus llega a la sala de prensa del Tour
■ Un periodista español dio positivo por coronavirus este viernes en el Tour. Tenía fiebre y se hizo un test en el laboratorio móvil. Inmediatamente se autoaisló y se marchó a su domicilio. Sus contactos, básicamente los medios nacionales desplazados, comunicaron la situación a la organización. Según el protocolo desarrollado por los Ministerios de Interior y Salud franceses, viajar o comer juntos sin mascarilla supone convertirse en un
“contacto de riesgo y conlleva la retirada de la acreditación”, así que EFE, Marca, TVE y AS no podían seguir en carrera. TVE y AS abandonaron Francia ayer por la mañana de acuerdo a sus códigos internos, con el aislamiento ya en marcha.
El servicio médico de ASO determinó que las personas con relación más prolongada pasaran un análisis PCR, decisión que se revocó poco después. Las medidas sanitarias del país señalan que un caso debe recluirse, pero si aparecen dos o tres positivos “generalmente tiene que cerrarse esa estructura”, así que el Tour no quiso arriesgarse a clausurar la sala de prensa a tan sólo dos etapas de acabar la competición. Tampoco alertó de las circunstancias. Para entrar en la caravana hacía falta un PCR negativo cinco días antes de llegar a Niza. Desde entonces, sentido común y ningún control, ya que los medios no pertenecían a la burbuja y se mezclaban con el público en salidas y metas. ASO recomendó una cuarentena de 14 días y efectuar un test a unas personas a las que negó esa prueba. No sabe si están contagiadas o si se ha creado un foco de infección en la sala de prensa. Mañana cada uno se va a sus lugares de origen. Prudhomme, director de la ronda, positivo en el primer día de descanso, regresó a la semana al recuperarse.