El Atlético hizo muchas cosas bien, pero el partido se le hizo largo

Noche larga seguramente la que vivirán los jugadores rojiblancos, con esa mezcla de rabia e impotencia después de haber tenido el control del juego y la clasificación en gran parte del partido. Los alemanes pusieron el equipo B, lo que a veces es un arma de doble filo porque terminas confiándote. Los rojiblancos hicieron un ejercicio perfecto de tapar su juego interior y sacando la pelota limpia ante la presión de los rivales. En ningún momento se contagiaron del ida y vuelta que te suele proponer un equipo como el Bayern, que vino con los deberes hechos. La seriedad sin el balón y el caudal de fútbol de los João Félix, Correa, Llorente, Trippier y Carrasco bien merecieron un mejor botín.

Se les hizo largo el partido a los rojiblancos en el último tercio. La falta de energía y los cambios del Bayern hicieron que el Atlético retrocediese quince metros y le faltase frescura para defenderse con el balón. Son partidos en los que es difícil encontrar consuelo y conciliar el sueño, porque te vienen imágenes del choque controlado y la clasificación cada vez que cierras los ojos. Lo que sí debe venirte una vez que los abres son las muchísimas cosas buenas que estás haciendo tanto en lo individual como en lo colectivo. En el césped se ve de otra manera. Yo, viéndolo desde fuera, soy realmente optimista para estar en octavos de final. Sólo un ejemplo: recordando lo que ha hecho el Atleti, dormí a pierna suelta.

se adentró hasta la línea de fondo y centró al área. El balón, raso, lo remató el delantero portugués adelantándose a su rival. El Atlético realizó una bonita jugada en la que mezcló la velocidad de Marcos Llorente con la buena anticipación de João Félix.